La canciller, Angela Merkel, tratará con el presidente estadounidense Barack Obama esta decisión
El Gobierno alemán se muestra indignado y ve inaceptable la suspensión de la venta de Opel, al grupo austro-canadiense Magna por parte del consorcio estadounidense General Motors.
La canciller, Angela Merkel, tratará con el presidente estadounidense, Barack Obama, esta decisión, que ha puesto en pie de guerra a los trabajadores.
Los comités de empresa de las plantas alemanas de Opel y los sindicatos del ramo llamaron a huelgas de protesta. En total unos 55.000 empleados en las cuatro fábricas alemanas de Opel fueron convocados a huelgas de advertencia a partir del jueves.
INDIGNACIÓN DEL MINISTRO DE ECONOMÍA
El nuevo ministro alemán de Economía, el liberal Rainer Brüderle, declaró sobre la decisión de la automotriz estadounidense General Motors (GM) de no vender finalmente sus subsidiarias europeas Opel y Vauxhall al fabricante de componentes automovilísticos Magna:
- «La actitud de GM frente a Alemania es inaceptable»
- «Ayer mismo los trabajadores (de las subsidiarias europeas del grupo automotor) se mostraron dispuestos a aceptar recortes salariales para encontrar una solución»
- «Ahora es GM quien tiene que responder ante esos empleados»
- «Antes de asumir mi cargo, manifesté claramente mis dudas sobre el comportamiento de GM. Lamentablemente se han confirmado»
- «No vamos a dejarnos presionar (…) por GM y espero que ponga sobre la mesa cuanto antes y de forma detallada sus anunciados planes de reestructuración, pues ocho semanas antes de Navidad ese trato hacia los trabajadores es inaceptable»
DECEPCIÓN DEL GOBIERNO GERMANO
Ulrich Wilhelm, portavoz oficial del gobierno germano, tras comentar que considera la decisión tomada por General Motors como «definitiva», declaró:
- «Puedo imaginar que durante los próximos días se producirá un contacto entre la canciller federal y el presidente de Estados Unidos»
El portavoz del Gobierno germano reiteró que las autoridades de este país se sienten decepcionadas y perplejas ante la actuación de General Motors. Sin embargo consideran que de la decisión tomada en Detroit se desprende que General Motors está dispuesto a asumir la total responsabilidad financiera sobre Opel.
LA REESTRUCTURACIÓN DE OPEL
En ese sentido recordó que GM tiene hasta el 30 de noviembre para devolver al Gobierno alemán el crédito puente de 1.500 millones de euros que se concedió para garantizar el funcionamiento de Opel mientras se decidía su futuro. GM ya ha anunciado que piensa devolver las ayudas.
Por su parte, una portavoz del ministerio alemán de Economía confirmó que General Motors tiene intención de presentar en breve un modelo de reestructuración para Opel.
Preguntada por la posibilidad de que GM solicite ayudas estatales de Alemania para garantizar el futuro de Opel, dijo que una petición así sería estudiada, pero que antes deberá conocerse al detalle el plan de reestructuración para el fabricante europeo. (Agencias)