Goldman Sachs decepciona a Wall Street

Goldman Sachs decepciona a Wall Street
. EFE/Archivo

Los decepcionantes resultados financieros de Goldman Sachs provocaron hoy que Wall Street dejara atrás el desmesurado optimismo con el que llegó a la presente temporada de resultados y que había provocado que se mantuviera durante dos días en su nivel más alto en dos años y medio.

El Dow Jones de Industriales, la principal referencia de la mayor plaza financiera del mundo, había logrado incluso permanecer durante gran parte de la jornada de hoy en terreno positivo, continuando así en niveles que no se veían desde junio de 2008.

Precisamente habían sido los avances de las entidades financieras los que habían logrado que el Dow Jones se colocara el viernes pasado en ese máximo, que además logró conservar el martes al cerrar a 11.837,93 unidades, después de que el lunes el mercado permaneciera cerrado.

Finalmente, el índice de referencia de Wall Street no pudo resistirse a los arrastres de las financieras y acabó con un descenso del 0,11%, hasta los 11.825,29 puntos.

Significativamente mayores fueron los descensos de los otros dos principales indicadores de los mercados neoyorquinos, el selectivo S&P 500 y el índice compuesto del mercado Nasdaq, que cedieron este miércoles un 1,01% y un 1,46%, respectivamente.

Para el índice compuesto del Nasdaq, donde cotizan numerosas empresas tecnológicas, el descenso de hoy fue el más pronunciado que vive desde noviembre.

El mal día en Wall Street se debió mayoritariamente a los decepcionantes resultados del banco Goldman Sachs, que acabó la jornada con un descenso del 4,69%.

Esa entidad informó de que en 2010 anotó un beneficio neto de 8.354 millones de dólares, el 38% menos que un año antes, cuando ganó 13.385 millones de dólares, en lo que tan sólo durante el último trimestre de 2010 registró un beneficio neto de 2.387 millones de dólares, un 52% menos que en el mismo periodo de 2009.

Siguiéndole la pista se colocaron los bancos Bank of America (-4,2%) y Morgan Stanley (-3,48%), ya que los inversores veían con temor hacia los resultados que ambas entidades presentarán los próximos dos días.

Los emisores de tarjetas de crédito Visa y American Express no se quedaron atrás y también bajaron un 2,93% y un 2,44%, respectivamente. Si el ambiente ya era poco favorable, el ánimo vendedor se vio reforzado tras la noticia de que la segunda de ellas despedirá a 550 trabajadores.

El efecto dominó de los malos resultados de Goldman llegó hasta el banco Wells Fargo, que acabó por bajar un 2,09% un día en el que informó de que durante su ejercicio fiscal 2010 anotó una ganancia neta récord de 12.360 millones de dólares, el beneficio más elevado jamás logrado por esta compañía.

El último trimestre de 2010 Wells Fargo también anotó una ganancia récord, pero la reducción de sus ingresos tanto en el ejercicio completo como en el último trimestre no dejaron que la compañía terminara en positivo.

También fue un mal día para las aerolíneas estadounidenses, que bajaron decididamente después de que la matriz de American Airlines anunciara que el año pasado registró una pérdida neta de 471 millones de dólares, aunque esa cifra es un 67,9% menor a las pérdidas que registró el año anterior.

Esa compañía bajó un 7,24%, como también lo hicieron sus competidoras Delta (-2,16%) y UnitedContinental (-2,56%).

Sorprendió este miércoles el fuerte cambio que dieron las acciones del gigante tecnológico Apple, que después de haber tocado máximos esta mañana comenzaron a bajar hasta cerrar la sesión con un descenso del 0,53%.

Esa bajada contrastaba con los excelentes resultados empresariales que presentó hace un día, con los que reveló que en el último trimestre de 2010 registró un beneficio neto récord de 6.004 millones de dólares.

Una de las pocas buenas noticias de la jornada llegó de la mano de IBM, que este miércoles tocó un máximo histórico gracias a que la jornada pasada anunció que 2010 fue el mejor año de su historia.

Desde el ámbito macroeconómico tampoco llegaron buenas noticias: El inicio de construcción de viviendas en Estados Unidos disminuyó en diciembre hasta la tasa más baja desde octubre de 2009, aunque el número de permisos por obras se disparó un 16,7%.

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