La compañía discográfica Warner Music Group ha contratado al banco de inversión Goldman Sachs con el objetivo de que busque un potencial comprador para la compañía, un proceso que coincide con la intención de Warner de seguir estudiando la posible adquisición de la discográfica británica EMI, según adelanta ‘The New York Yimes’.
Según el diario estadounidense, la decisión de contratar al banco de inversión surge después de que a la compañía le hayan salido «varios pretendientes», como la empresa Kohlberg Kravis Roberts (KKR), que en los últimos meses se ha puesto en contacto con la dirección de la discográfica con la intención de hacer una oferta por la compañía.
Un ejecutivo de la empresa, que prefiere mantener el anonimato, explicó a ‘The New York Times’ que, en vez de negociar en solitario con KKR, la dirección decidió comenzar un proceso de venta formal al contratar a Goldman, que recientemente se ha puesto ya en contacto con inversores y empresas del sector de la comunicación para tratar la posible venta de Warner.
Fuentes cercanas al proceso apuntan la posibilidad de que la discográfica decida finalmente no vender toda la compañía sino sólo Warner/Chappell, su «preciado brazo editorial».
Al mismo tiempo, otro grupo de trabajo de Goldman ha estado trabajando en una potencial adquisición de EMI por parte de Warner. De hecho, Goldman se ha puesto ya en contacto con Citigroup, que posee una gran parte de la deuda de EMI y pronto podría hacerse con el control a la empresa si ésta no cumple con sus pagos.
Warner, que fue adquirida en 2004 por un grupo de inversores por 2.600 millones de dólares (1.914 millones de euros) en efectivo, es la única empresa puramente musical que cotiza en bolsa. Además, ha sido una de las discográficas menos afectadas por la caída del negocio en los últimos años y actualmente ha conseguido incluso mejorar sus márgenes de beneficios gracias al recorte de gastos.
