La aprobación por el Eurogrupo del paquete de hasta 100.000 millones en ayudas a la banca no disipa la incertidumbre sobre la deuda española, tras la petición de ayuda de Valencia
Ni un momento de respiro. Tras la nefasta jornada del viernes 20 de julio de 2012, cuando una improvisada pero no inesperada petición de rescate de la Comunidad Valenciana con los mercados abiertos disparó las alarmas, la prima de riesgo ofrecida a los inversores por los bonos españoles a diez años en relación con los alemanes continúa en máximos históricos y ha llegado por primera vez a los 641 puntos básicos.
EL MINISTRO AGUANTA EL TIPO
El Ministro de Economía, Luis de Guindos, ha comparecido este lunes en la Comisión de Economía del Congreso y allí, ha aseguradha asegurado que España vaya a pedir un rescate a sus socios europeos, pese a «las situaciones de irracionalidad en los mercados», que ha llevado a la prima de riesgo a zona de máximos.
De Guindos ha hecho esta consideración en declaraciones a los medios de comunicación antes de comparecer, a petición propia, en el Congreso de los Diputados y para explicar la ayuda europea a la banca.
Preguntado si descarta el rescate de España, de Guindos ha respondido tajante: «Por supuesto».
Según el ministro, son las dudas sobre la situación de la unión monetaria la que está provocando la fuerte subida de la prima de riesgo de España y el resto de países más débiles de la región.
Tras repasar los desequilibrios estructurales de la economía española, poniendo especial énfasis en la burbuja inmobiliaria que ha erosionado el sistema financiero español, ha recalcado que el problema del país ha sido que nos han tomado las medidas necesarias a tiempo para intentar corregir los desastres.
«La ayuda de Europa nos ayudará a completar la reestructuración financiera que hemos puesto en marcha».
«Las negociaciones para recibir la asistencia financiera han sido intensas y rápidas».
«Las negociaciones han sido exitosas no sólo para España sino para toda la Eurozona».
«El responsable último del pago del préstamo será el Estado Español».
«No hay nuevas exigencias macroeconómicas para España».
LA BOLSA SE DESPLOMA
El selectivo ha llegado a desplomarse el 3,5% y ha marcado mínimos del día en 6.021 puntos mientras el riesgo país s disparaba hasta los 641 puntos.
Y es que la rentabilidad del bono a 10 años ha superado la barrera del 7,5% empujando al país hacia el rescate total. España necesita al menos 400.000 millones para no tener que acudir al mercado en dos años.
La sesión de este 23 de julio de 2012 parece una copia casi exacta de la del viernes, con toda la atención puesta sobre España, que sigue fuertemente presionada por los inversores.
Las caídas son generalizadas en toda Europa, pero son mucho menos acentuadas que en el Ibex 35.
El pesimismo de la renta variable europea refuerza el «quiero y no puedo» de Wall Street.
Índices como el Nasdaq acabaron la semana bajo su directriz bajista de corto plazo, lo que indica que puede que el mercado haya establecido momentáneamente un techo.
Para esta semana habrá algunas citas macroeconómicas a tener en cuenta, como los datos de empleo que se publicarán en España o la subasta de letras a 3 y 6 meses.
Además, presentarán sus resultados muchas compañías, entre ellas Mc Donald’s, Coca Cola, Apple o Amazon.
UN PAQUETE QUE NO HACE EFECTO
La aprobación por parte del Eurogrupo del paquete de hasta 100.000 millones de euros en ayudas a la banca española el pasado viernes no ha servido para disipar la incertidumbre sobre la deuda española, incrementada incluso tras conocerse la decisión de los Gobiernos valenciano y murciano de pedir la adhesión al mecanismo de la liquidez autonómica aprobado por el Consejo de Ministros en su reunión del pasado 13 de julio.
Por su parte, el Banco Central Europeo (BCE) anunciaba también que deja de aceptar por el momento los instrumentos de deuda emitidos o plenamente garantizados por el Gobierno griego como avales en las operaciones de política monetaria del Eurosistema.
En este sentido, las palabras pronunciadas este fin de semana por el presidente de la entidad, Mario Draghi, sobre el papel del organismo emisor asegurando que «el BCE no está para resolver los problemas financieros de los Estados» han empeorado más si cabe la situación.
El euro llega a su posición más baja desde octubre de 2010 y cotiza a 1,2093 dólares.