La comisaria de Comercio, Cecilia Malmström, ha dicho este martes a una delegación del Congreso de los Diputados que la ha visitado en Bruselas que los acuerdos comerciales de la UE, en particular el que negocia con Estados Unidos, «pueden ayudar a España en muchos sectores», especialmente el de las renovables, el automovilístico o el farmacéutico.
«Cada que vez que la Unión Europea negocia un nuevo acuerdo comercial, estamos abriendo nuevos mercados y creando nuevas oportunidades de negocio para las empresas exportadoras europeas. Y eso se traduce en miles de nuevos empleos. Por eso tenemos una agenda muy ambiciosa en materia de comercio internacional. Una agenda que puede ayudar a España en muchos sectores», ha resaltado Malmström. Por lo que se refiere a la industria de las renovables, la comisaria de Comercio ha explicado que la UE está negociando un pacto para eliminar los aranceles sobre productos como turbinas o paneles solares con 13 países, entre ellos China, EEUU y Japón. Y también busca pactos para obtener un mejor acceso en la contratación pública en EEUU, Japón, Vietnam o China. En cuanto a los fabricantes de coches, Malmström ha dicho que el acuerdo con Canadá ha reducido los aranceles en más de un 6% y que si la UE alcanza un pacto con Mercosur permitiría «eliminar el arancel del 35% sobre los automóviles que impide las exportaciones europeas a Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay». «La industria automovilística española también ganará si podemos hacer que las normas europeas y americanas de seguridad para automóviles sean más compatibles», ha alegado. «Otro ejemplo de los beneficios para los españoles de una política comercial abierta es el sector farmacéutico, que da empleo directo a más de setenta mil personas en Europa. Tanto las empresas de genéricos como las que se basan en la investigación y desarrollo se beneficiarían de la cooperación regulatoria que estamos haciendo con los Estados Unidos», ha explicado. El acuerdo de libre comercio con EEUU beneficiará también a las pymes españolas en sectores como las telecomunicaciones por satélite, la industria alimentaria o «los fabricantes de calzado de Alicante que se enfrentan a un arancel del 35% para vender sus zapatos en Estados Unidos». La comisaria de Comercio ha defendido finalmente que los beneficios de estos pactos «no son sólo económicos» sino que también pueden «ayudar a posicionar a Europa en un mundo que está cambiando muy rápidamente» y a «proteger los valores europeos y nuestras normas laborales o medioambientales».