Credit Suisse, la segunda mayor entidad bancaria helvética, obtuvo un beneficio neto atribuido de 2.105 millones de francos suizos (2.008 millones de euros) en los seis primeros meses del año, lo que supone multiplicar por trece los 159 millones de francos suizos (151 millones de euros) del mismo periodo de 2014, informó la entidad.
La cifra de negocio de Credit Suisse entre enero y junio alcanzó un total de 13.602 millones de francos suizos (12.976 millones de euros), un 2,3% más que un año antes. En el segundo trimestre, la entidad suiza obtuvo un beneficio atribuido de 1.051 millones de francos suizos (1.002 millones de euros), frente a las pérdidas de 700 millones de francos (668 millones de euros) en el mismo periodo de 2014. El banco suizo precisó que sus cuentas del segundo trimestre en 2014 se vieron penalizadas por la inclusión de un cargo extraordinario de 1.600 millones de francos (1.526 millones de euros) por litigios en EEUU. Los ingresos de Credit Suisse entre abril y junio sumaron 6.955 millones de francos (6.634 millones de euros), un 7,6% más que un año antes. El consejero delegado de la entidad, Tidjane Thiam, destacó la mejora de los resultados de Credit Suisse con una evolución particularmente reseñable en Asia Pacífico, donde la colaboración y alineamiento de los negocios de banca privada y banca de inversión rindió un «excelente» incremento de los beneficios. NUEVA ESTRATEGIA. Por otro lado, Thiam apuntó que la dirección de Credit Suisse prepara una nueva estrategia para el desarrollo de la entidad que será desvelada antes de finales de año con vistas a establecer un modelo de negocio que permita alcanzar un crecimiento rentable y sostenible. «El equipo gestor y yo hemos comenzado a evaluar cómo mejor desarrollar la entidad a través de una revisión estratégica en profundidad», anunció el consejero delegado de Credit Suisse. «Antes de final de año estableceremos una estrategia y modelo de negocio que nos permitirá alcanzar un crecimiento rentable y sostenible», añadió Thiam, quien señaló que este modelo debería afrontar algunas de las presiones detectadas en el segundo trimestre. «Buscaremos optimizar nuestra cartera de negocios para hacerla menos intensiva en capital y garantizar que generamos un exceso de capital y maximizamos el valor para nuestros accionistas en el ciclo económico», apuntó.
