El secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, ha afirmado este jueves que la tasa de inflación del 0,1% en el mes de julio refleja la «debilidades» que aún mantiene la economía.
«Una inflación muy baja es el resultado de la baja cotización del petróleo y de las incertidumbres políticas a nivel mundial, pero fundamentalmente de una mala de evolución de las rentas fruto de la devaluación salarial, de las congelaciones y recortes en salarios públicos y pensiones y de las políticas basadas en el ajuste y las contrarreformas», ha añadido en un comunicado. Por ello, Ferrer ha exigido que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016 se orienten hacia la inversión productiva, las políticas industriales y tecnológicas, los servicios sociales y la mejora de las pensiones. A su juicio, es necesario también que descongelar el Indicador Público de Rentas de Efectos Múltiples (Iprem), al que están referenciadas muchas ayudas públicas, y llevar la subida salarial de los empleados públicos más allá del 1% planteado, para que no pierdan poder adquisitivo. Para terminar, Ferrer también ha llamado a aplicar «de manera completa» en el sector privado el III Acuerdo Interconfederal para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), que fija una subida salarial máxima del 1% en 2015 y del 1,5% en 2016.
