La agencia de calificación crediticia Standard & Poor’s (S&P) ha confirmado el ‘rating’ de Francia en ‘AA/A-1+’ al considerar que sus instituciones y economía «respaldan» su solvencia, aunque lo mantiene en perspectiva negativa, ante la posibilidad de que las próximas elecciones desvíen al Ejecutivo de su trayectoria actual.
S&P ha explicado en un comunicado que el ‘rating’ del país galo refleja la fortaleza de sus instituciones, además de su economía rica, productiva y ampliamente diversificada. Sin embargo, a juicio de la agencia estas fortalezas se ven «parcialmente» debilitadas por los altos niveles de gastos del Ejecutivo, además del aumento de deuda respecto a su Producto Interior Bruto (PIB). En este sentido, S&P ha destacado que las medidas estructurales adoptadas hasta el momento por Francia son probablemente insuficientes para respaldar un fuerte crecimiento de la economía o para hacer frente a las altas tasas de desempleo. En concreto, Standard & Poor’s ha recordado que el desempleo de larga duración representa más del 40% del desempleo total, cuya tasa asciende al 10%. Por otro lado, la agencia ha indicado que pese a que las condiciones externas y financieras favorables dan al Ejecutivo galo margen de maniobra, observa cierto «riesgo» de que pueda ejecutar reformas ante la posible oposición dentro del partido gobernante y de cara a las próximas elecciones generales, previstas para 2017.