Andrew Bailey, hasta ahora subgobernador del Banco de Inglaterra con competencias en el área de regulación prudencial de la institución, ha sido designado nuevo consejero delegado de la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) de Reino Unido, según informó el banco central británico.
Bailey, que permanecerá en su actual posición hasta el nombramiento de su sucesor, pondrá fin así a una carrera de 30 años dentro del instituto emisor británico.
«Andrew es un extraordinario servidor público que ha dedicado su completa vida profesional a servir a la gente de Reino Unido», declaró el gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney.
«El éxito del nuevo sistema de regulación financiera en Reino Unido depende de que tanto los reguladores a nivel de conducta como a nivel prudencial alcancen los objetivos marcados por el Parlamento», apuntó Andrew Bailey tras su nombramiento.
«Los recientes acontecimientos han mostrado que la cuestión más acuciante en el sistema en este momento es la necesidad de un liderazgo estable en la FCA», añadió.
