La agencia de calificación Fitch Ratings ha alertado este viernes de la debilidad de liquidez de Cataluña y su acumulación de vencimientos de deuda a corto plazo, que requieren «una gestión de deuda proactiva y una relación de colaboración con el Gobierno central».
En un comunicado, ha repasado que la autonomía necesita la autorización del Estado para endeudarse a largo plazo, y que los mecanismos de liquidez no cubren específicamente la deuda a corto plazo, aunque el Gobierno central está considerando extender el programa de liquidez de las autonomías para incluir la deuda a corto plazo. Fitch ha afirmado que seguirá de cerca la situación de liquidez de Cataluña y del resto de autonomías con un riesgo significativo de refinanciación a corto plazo: «Si el apoyo de liquidez no se refuerza, Fitch evaluará el impacto en el rating de las regiones afectadas». Cataluña debe hacer frente este año a 4.627 millones de euros de deuda a corto plazo, lo que representa casi el 7,5% de su deuda total y aproximadamente el 25% de sus ingresos, frente a 5.173 millones en 2015, ha expuesto Fitch. A finales del año pasado, la deuda a corto plazo de Cataluña suponía el 49,4% de la del conjunto de autonomías, que era de 9.900 millones, y la agencia de calificación augura que la «débil ejecución presupuestaria» hace probable que la región siga renovando deuda a corto plazo.