El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, aboga por convertir el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) en un Tesoro europeo común con más competencias y «cierto control» sobre los Presupuestos Generales de cada Estado miembro con el objetivo de alcanzar «una posición fiscal consolidada».
Así lo ha señalado durante una entrevista en ‘Financial Times’, en el marco de la propuesta de impulsar «reformas profundas» en el corto plazo para corregir las deficiencias en la gobernanza de la eurozona. «Tenemos un espacio de oportunidad de no más de seis meses después de las elecciones alemanas –en septiembre–«, ha urgido De Guindos. En su opinión, este Tesoro o Fondo Monetario Europeo tendría «muchas más competencias» de las que tiene el MEDE en la actualidad y contaría con un presupuesto propio o con control sobre parte de los presupuestos nacionales. «Debería ser capaz de decidir sobre un porcentaje de los Presupuestos Nacionales o sobre un fondo de inversión europeo que frenase o acelerase el gasto», ha explicado. De Guindos ha reconocido que existe una resistencia popular y política respecto a llevar a cabo una integración económica y financiera más profunda, pero considera que «no hay alternativa». «Solo existen dos caminos, ir hacia adelante o hacia atrás, pero no podemos quedarnos donde estamos ahora», ha señalado. El ministro de Economía ha señalado que, si no se resuelven pronto las debilidades actuales en la gestión de la zona euro, podría romperse la moneda única, lo que podría significar que España volviera a la peseta. En este sentido, ha subrayado la importancia de impulsar la integración europea. «No podemos permitirnos un segundo ‘Brexit’, debemos permanecer unidos», ha advertido. MAS INTERVENCION EUROPEAEn cuanto a la mutualización de la deuda, considera que debería efectuarse solo en la «fase final» de las reformas de la zona euro. «Nos hemos enfocado demasiado en los bonos, que son un punto secundario, lo principal es la integración de la política económica, no solo en cuanto a la política fiscal sino también en áreas como las reformas estructurales», ha apuntado.
Para ello, señala que debería aceptarse que los organismos competentes a nivel europeo interviniesen en las políticas económicas de los Estados miembros. «Hace falta un sistema que obligue a los países a analizar sus brechas en competitividad». A modo de ejemplo, ha señalado que sería necesario que «alguien» dijera a España que necesita llevar a cabo reformas en el área de servicios profesionales o que dijese a otros países que deben llevar a cabo una reforma laboral en un determinado periodo de tiempo. En otro orden de cosas, De Guindos se ha referido a la resolución de Banco Popular por parte de las autoridades de supervisión europeas como «un signo de que el país está haciendo progresos». En su opinión, la absorción de la entidad por parte de Grupo Santander muestra que España «claramente respeta las reglas» y que las reglas que los socios europeos se han dado «funcionan». Sobre las elecciones de Reino Unido, el ministro de Economía se ha hecho eco de las preocupaciones sobre las dificultades que el Gobierno británico podría encontrarse para negociar un acuerdo de salida de la Unión con sus socios europeos. «Espero que el resultado de las elecciones no tenga un impacto negativo en la posición de Reino Unido durante las negociaciones», ha indicado. «Siempre es mejor tener una contraparte para cerrar un acuerdo».
