La diputada socialista Rocío de Frutos, una de las que fue sancionada por votar ‘no’ a la investidura de Mariano Rajoy, quiere abrir un debate en el seno del Grupo Socialista sobre el Acuerdo Económico y Comercial Global entre la Unión Europea y Canadá (CETA, por sus siglas en inglés) y atender así a las distintas «sensibilidades» que existen respecto a este tratado.
En declaraciones a Europa Press, De Frutos cree que es «necesario» que el partido debata la posición que adoptará de cara a la ratificación o no de este tratado en el Congreso, donde hasta ahora el PSOE se ha mostrado partidario de apoyar su entrada en vigor en todas las votaciones celebradas hasta entonces. De hecho, el pasado mes de mayo el Pleno del Congreso aprobó admitir a trámite el tratado con el respaldo de los socialistas, rechazando tanto la enmienda a la totalidad presentada por Unidos Podemos como el examen previo de constitucionalidad que la coalición de izquierdas solicitaba para el acuerdo comercial, para que el Alto Tribunal se pronunciara si existía vulneración de artículos de la Carta Magna española. MOCIONES EN AYUNTAMIENTOS CONTRA EL CETASin embargo, De Frutos recuerda «la multitud de mociones» presentadas tanto en ayuntamientos como en parlamentos regionales a instancias de los socialistas o apoyadas por el PSOE para rechazar la implantación de este tratado en los términos aprobados el pasado mes de febrero por la UE y Canadá.
«Existe una corriente en el partido que no apoya este tratado y los efectos que puede llegar a tener», ha señalado, pidiendo por tanto que tenga lugar un debate sobre la postura que adopte finalmente el partido, pues cree que a pesar de las votaciones ya celebradas, aún no está definido qué criterio adoptará el partido, tras la renovación de su dirección este fin de semana. En todo caso, reclama que se respeten esas distintas «sensibilidades» que recelan de los posibles efectos que puede tener este acuerdo comercial. La diputada gallega pone el ejemplo de su localidad, Ourense, donde prácticas como la deslocalización de empresas ha producido la desaparición del tejido industrial en la región que. Paradójicamente, reconoce que existe una vuelta de las empresas que, apostando por la calidad, vuelven a implantar su producción en el país. Sin embargo, cree que acuerdos de libre comercio como el CETA favorecen la marcha de las empresas, perjudicando por tanto, los puestos de trabajo.
