Se ha puesto esto color de hormiga. Las bolsas europeas se hunden ante el nuevo batacazo en Wall Street. Los decepcionantes resultados de Amazon y de la matriz de Google, Alphabet, están desatando el pánico en el mercado con caídas que han llegado a superar el 2%.
Wall Street abre este 26 de octubre de 2018 con profundos descensos, con el Nasdaq llegando a casi un 3%.
El Ibex 35 ha cerrado la sesión con un descenso del 0,62% en 8.730,2 puntos, tras moverse entre un mínimo en 8.627 puntos y un máximo de 8.746 puntos. El selectivo encadena su quinta semana consecutiva de descensos al acumular un retroceso del 1,81%.
Las bolsa española cierra su quinta semana consecutiva de caídas. Desde los máximos de septiembre, el Ibex 35 lleva acumulada una caída de casi el 10%, dejándose casi 900 puntos. A falta de tres jornadas para cerrar octubre el retroceso acumulado asciende al 7% cumpliendo la profecía de octubre como un mes maldito para el mercado. Si no cambia la cosa, sería el peor mes de octubre desde que estalló la crisis financiera en 2008, cuando el selectivo se dejó un 17%.
Las bolsas europeas europeas han caído arrastradas por Wall Street. Ayer se esperaban con gran expectación los resultados de Amazon y Alphabet. Los dos gigantes tecnológicos decepcionaron con sus números y previsiones desatando todos los temores de Wall Street a las altas valoraciones de las compañías del sector.
Wall Street ha abierto la sesión con fuertes descensos con el Nasdaq cayendo un 3%. El nerviosismo se ha instalado en Europa. Los descensos han llegado a superar el 2% en Francia, Alemania, Italia y el Eurostoxx.
En la recta final de la sesión del Viejo Continente ha habido cierto maquillaje apoyándose en un recorte de pérdidas de las bolsas estadounidenses. Al cierre el Cac se ha dejado un 1,2%. El resto de plazas europeas baja menos de un 1%.
En el Ibex 35 los descensos han sido más moderados en parte por los resultados empresariales. Sabadell resurge en bolsa casi un 5% al calor de los resultados.
El banco ha anunciado esta mañana un beneficio de 247,8 millones de euros entre enero y septiembre de este 2018, lo que supone una caída del 56,5% respecto a los 569,4 millones obtenidos en el mismo periodo del año pasado debido a los ajustes por las ventas de carteras institucionales y las provisiones extraordinarias de la migración de su filial británica, TSB.
CaixaBank, por su parte, también se sitúa entre los pocos valores que cotizan en verde al registrar un beneficio de 1.768,8 millones de euros, lo que supone un 18,8% más respecto al mismo periodo del año pasado gracias a la mayor aportación del banco portugués BPI, la fortaleza de los ingresos, la reducción de las dotaciones y la contención de costes. Las acciones han cerrado con una subida del 1,3%.
En cuanto a IAG, la aerolínea ganó 2.514 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, lo que supone un incremento del 57,4% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
En el lado opuesto, destacan las caídas de Viscofán alrededor de un 20% tras anunciar ayer con el mercado ya cerrado que sus ganancias en 2018 serán ligeramente inferiores a lo que había pronosticado anteriormente.
Las pérdidas de Acerinox también son sonadas, sobre el 8%, después de anunciar una menor actividad en el cuarto trimestre del año por las incertidumbres macroeconómicas y los menores precios de las materias primas.
A los inversores se les acumulan los problemas. Hay intranquilidad por la alerta del BCE sobre el crecimiento económico, el Brexit, la guerra comercial y el choque entre Italia y Bruselas a cuenta de los presupuestos, entre otras cuestiones.
Todos los frentes están abiertos especialmente el italiano. Con el mercado cerrado, la agencia de calificación S&P revisará el rating de Italia. Hace justo una semana Moody’s dejó la deuda italiana a un escalón del bono basura. Se espera lo mismo de S&P pero podría aumentar la presión sobre la deuda italiana la próxima semana si además coloca su nota con perspectiva negativa.
El análisis técnico del Ibex 35 no ofrece suelo hasta el soporte de los 8.500 puntos. Según se aleja de los 8.800 puntos, crece la posibilidad de que encuentre suelo en este nivel. El siguiente soporte está en los 7.580 puntos.
La amenaza de que podamos seguir cayendo ‘a cuchillo’ no se cancelará mientras una eventual subida de corto plazo no lleve a los principales índices europeos a cerrar los huecos que generaron a la baja este pasado martes. Para ello el DAX 30 alemán debería conseguir recuperar los 11.525 puntos y el Ibex 35 los 9.074 puntos.
