Según datos publicados durante la noche, los aranceles del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, han lastrado considerablemente tanto las importaciones de China, que se han dejado un 7,6% en diciembre, como las exportaciones, que han caído un 4,4%, los peores resultados para ambas desde 2016, antes de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. De hecho, los datos económicos de la segunda economía del mundo se han ido ralentizando de forma constante.
Durante los últimos días de 2018, el sector manufacturero de China, tanto en su lectura a nivel privado como la lectura oficial del Gobierno, entró en territorio de contracción. Los inversores, ya nerviosos por las previsiones acerca de una ralentización económica a escala mundial y nacional, han abandonado las acciones y las divisas vinculadas a la economía China, incluido el dólar australiano. Australia, el mayor socio comercial de China, se ha visto especialmente afectado por la situación económica. Así, la divisa de Australia se ve perjudicada a menudo cuando los datos de China no cumplen expectativas.
El dólar australiano completa un triángulo simétrico, cuyo repunte a la baja ha indicado que los bajistas pusieron fin al empate haciéndose con el control. Al superar la oferta a la demanda, los vendedores se vieron obligados a ceder en su precio de venta y buscar compradores dispuestos a niveles más bajos.
La penetración inicial ha incluido un cruce por debajo de la línea de tendencia alcista desde el martes.
Hay que tener en cuenta que el RSI ha mostrado que ese impulso refleja el precio con una pausa en la tendencia alcista, aunque la consolidación del RSI incluye un desmantelamiento de la línea de tendencia alcista, indicando que el precio hará lo propio. Y de hecho así ha sido, rompiendo su propia línea de tendencia alcista.
Actualmente, el precio oscila con un movimiento de retorno, para volver a probar el cambio de las tendencias, una dinámica compleja que incluye una combinación de varias fuerzas, incluyendo un repunte breve, posiciones largas y especuladores subiéndose al carro.
En el momento de redactar estas líneas, el precio está reanalizando el descenso de la línea de tendencia alcista fallida. Si la totalidad de las fuerzas mencionadas superan la supuesta oferta por la línea de tendencia alcista rota, la siguiente prueba sería el triángulo, con la estrella fugaz confirmando la resistencia del «doble» patrón envolvente bajista (envolviendo dos velas verdes), en el punto límite de nuestra visión bajista en 0,7222.
Hay que tener en cuenta que el RSI está impulsando el precio que va a reconquistar el vértice del triángulo, en alrededor de 50, que marca el nivel medio en este indicador, otro indicador de equilibrio que refleja el vértice del triángulo.
Estrategias de Trading – Configuración de posición corta
Los traders conservadores esperarán hasta que el precio vuelva a poner a prueba completamente el triángulo, alcanzando por lo menos el punto de ruptura en torno al nivel de 0,72, para después registrar mínimos por debajo de del nivel de 0,7175 a las 7:00 horas (CET).
Los traders moderados podrían contentarse con un reanálisis exitoso de la línea de tendencia alcista anterior, seguido de un mínimo más bajo.
Los traders agresivos podrían arriesgarse a posicionarse en corto con las primeras señales de resistencia, como una vela roja tras una vela verde o una pequeña de cualquier color, o una estrella fugaz.
Ejemplo de operación:
- Entrada: 0,7190
- Orden de minimización de pérdidas: 0,7200
- Riesgo: 10 puntos
- Objetivo): 0,7160
- Recompensa: 30 puntos
- Relación riesgo-recompensa: 1:3
