Más información
Nuevamente los tenedores de Bitcoin hemos sido víctima de su altísima volatilidad.
En esta oportunidad el brusco cambio de su valor se debió -nuevamente-a un tweet de Elon Musk donde el CEO de Tesla desestimó el uso de Bitcoin como medio de pago por ser perjudicial para el medio ambiente.
“La criptomoneda es una buena idea en muchos niveles y creemos que tiene un futuro prometedor, pero esto no puede tener un gran costo para el medio
ambiente”.
Sostuvo Musk en su cuenta de Twitter. Luego Bitcoin cayó a USD$ 35.000.
Desde su creación, Bitcoin se ha convertido en un activo altamente volátil y sumamente voluminoso.
Para darnos una idea del valor y del volumen que se está tradeando en los mercados, Bictoin tiene un valor de mercado de alrededor de USD$ 700 mil millones.
Antes que cuantificar el daño ambiental que Bitcoin puede traer aparejado, debemos entender como funciona.
- Para producir monedas digitales, se necesitan muchísimas
computadoras para que se resuelvan complejas ecuaciones, lo
suficientemente complejas como para que no se puedan hackear. - Quien primero resuelva la ecuación, recibirá monedas virtuales a cambio
(actividad a la se refiere como “minería”). - Todo este proceso-aunque parezca simple- demanda una enorme
cantidad de energía para que las computadoras que usan los mineros
estén conectadas todo el tiempo todos los días.
En resumen, para que funcione Bitcoin hace falta mucha energía. Y cuando decimos mucha energía estamos hablando de la misma cantidad que consume un país de tamaño mediano en Europa.
Esta energía de la que necesita Bitcoin para seguir funcionando, va incrementando a medida que sube su valor ya que a medida que esto ocurre, la minería (computadoras que resuelven ecuaciones complejas) demandará más uso de electricidad.
Muchos expertos ya están haciendo sus previsiones del impacto que podría llegar a tener Bitcoin en el medio ambiente. Algunos afirman que Bitcoin sólo podría incrementar el calentamiento global 2ºC en 30 años.
Estamos empezando a ver ánimo por parte de varios países en regular las monedas digitales. Tal es así que Jay Powell-Presidente de la FED- en un video subido a la página web de la Reserva Federal de Estados Unidos ha dicho que elevará un proyecto de moneda digital del Banco Central para que sea tratado en el congreso, siendo su principal enfoque “garantizar un sistema de pago seguro y eficiente que brinde amplios beneficios a los hogares y empresas estadounidenses”.
Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas también está buscando formas en las que pueda evitar que el crecimiento de las criptomonedas ponga en jaque su trabajo sobre el cambio climático, y por ello está apoyando la iniciativa "Acuerdo Climático Cripto”, con la idea de no frenar la innovación en las finanzas digitales, pero sí asegurarse de que los futuros proyectos basados en blockchain estén diseñados para consumir menos energía.
El mayor interrogante que plantea esta cuestión sobre el consumo energético que demanda Bitcoin, es si sus defensores siguen apoyando la causa. Por supuesto encontramos posturas muy divididas. Hay quienes sostienen que esto incentivará el desarrollo de energías renovables de manera más rápida, mientras que otros sostienen que invertirán más en energías renovables como para compensar la ecuación…
Bitcoin y las demás criptomonedas pueden ser una gran idea, alternativa de descentralización, inversión, etc. pero claro está que dejará su huella en el medio ambiente.
