Adquirir alguno de los coches eléctricos de segunda mano alternativos al motor de combustión es una buena forma de introducirse en el mundo eléctrico, encontrando modelos más antiguos a mejor precio que uno nuevo y facilitando así el acceso a la tecnología a conductores que tal vez no puedan permitirse comprar un coche recién salido de fábrica, según recoge revistagq y comparte VueltarapidaGT para Periodista Digital.
En lo que llevamos de 2019 han aumentado en un 30% los coches eléctricos usados disponibles para compra con respecto a los dos años anteriores. Algo que está directamente relacionado con el aumento creciente de las ventas de coches eléctricos nuevos, con unas ventas que en los cinco primeros meses de este año en España se han visto incrementadas en un 78% respecto al mismo periodo del año pasado.
En el caso de decidirse por comprar un eléctrico de segunda mano conviene seguir un consejo básico: comprobar el estado de la batería. Es probable que el coche eléctrico de segunda mano haya perdido capacidad en la batería. La mayoría de los fabricantes ofrecen garantía a sus baterías durante al menos 8 años y estiman una pérdida del 20% en la capacidad de sus baterías para ese momento. Esto reduciría una autonomía de 130 kilómetros en cerca de 25 kilómetros. Por eso es importante comprobar la autonomía del vehículo antes de comprarlo y simplemente con una recarga completa podrás comprobar el estado de recarga, mientras que el sistema electrónico del vehículo te informará de la autonomía esperada. Este dato suele ser muy preciso, ya que la mayoría de vehículos tienen sistemas que monitorizan la batería del vehículo para controlar la capacidad de rendimiento y de la batería.
En 2018 se vendieron en España alrededor de 12.000 coches eléctricos, 13.176 si sumamos las furgonetas, casi el 1% de las matriculaciones del año. A pesar de que llevan un tiempo ya en el mercado, el desarrollo tecnológico experimentado por este tipo de vehículos en los últimos años y las medidas de restricción al tráfico en las grandes ciudades aplicadas a vehículos de combustión, han provocado un incremento en la venta de estos coches, también en el mercado de segunda mano. Si juntamos los híbridos a los eléctricos, el peso llega hasta el 5,4% de las matriculaciones de turismos el pasado año.
Pero siguen siendo coches caros, pues por lo general en ambos casos su precio medio supera los 35.000 euros. Así, los interesados empiezan a fijarse en el mercado de ocasión, aunque todavía hay pocas unidades disponibles. Cada vez hay más usuarios que venden su vehículo antiguo para hacerse con uno híbrido o eléctrico, y esto se está notando también en el mundo de los seminuevos donde la bajada de precio hace que la apuesta eco sea aún más factible.
Si estás pensando en hacerte con un coche respetuoso con el medioambiente seminuevo debes tener en cuenta que no puedes beneficiarte de las ayudas públicas a la compra de los modelos eléctricos. Aun así, el aumento de la oferta de eléctricos de ocasión debido a la renovación de flotas de carsharing y descuentos en el precio que superan el 50% con respecto a los vehículos nuevos convierten a este mercado en una magnífica opción para dar el salto a la movilidad cero emisiones.