Los controladores acusan a Blanco de orquestar una campaña mediática

El colectivo de controladores ha acusado al ministro de Fomento, José Blanco, de haber orquestado una campaña mediática esta semana en vísperas de la ‘luz verde’ al Real Decreto para la certificación de proveedores de servicios de control del sector privado, que vio la luz hoy.

En declaraciones a Europa Press, el portavoz de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), Daniel Zamit, aseguró que todas las acusaciones de absentismo laboral sobre el colectivo forman parte «de una campaña de desprestigio» organizada para que se hable «de otra cosa» mientras se anuncia «la privatización de un servicio público».

A Zamit le pareció «muy feo» que las acusaciones de absentismo comenzaran en la misma semana en la que se habia iniciado un clima de diálogo en las negociaciones y destacó que se trata de «la misma maniobra» que la realizada con anterioridad del anuncio del Real Decreto por el cual se modificó la Ley de tránsito aéreo.

Zamit insistió en que no ha habido abstentismo y que los retrasos registrados son los «normales» en una operación salida. «Hablar de absentismo es una manipulación de la realidad», subrayó el portavoz, quien recordó que muchas de estas bajas son permisos por maternidad y otros de larga duración conocidos por Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) con la suficiente antelación.

Por otro lado, el portavoz señaló que el colectivo «no está ni a favor ni en contra» de que se privatice el sistema de control, «siempre que la empresa anteponga la seguridad a los intereses económicos».

No obstante, recordó que AENA «sigue siendo rentable» y que el servicio de control no es el que lastra sus cuentas sino los 12.000 millones de deuda que arrastra como consecuencia de inversiones «que no tienen nada que ver con los controladores».

El responsable recordó que el sueldo de los controladores «sale de las tasas que pagan los ciudadanos con sus billetes de avión» y no del contribuyente, y que si necesitan ahora privatizar los servicios de control para tener menores costes, esto no es culpa del colectivo. «AENA sigue ganando dinero, otra cosa es que no pueda afrontar sus deudas. Si ha habido una mala gestión no se debe cargar sobre los hombros de los controladores», destacó.

Sobre la marcha de las negociaciones, Zamit señaló que los controladores ya han presentado gran parte de sus propuestas sobre el nuevo convenio y que ahora es el gestor aeroportuario el que las está analizando.

JORNADA LABORAL Y DECISIONES TECNICAS

En cuanto a las propuestas sobre la mesa, el responsable insistió en que no hay reivindicaciones económicas, sino que lo que se defiende es por un lado cuestiones con respecto a la jornada laboral y por otro que las decisiones técnicas sigan siendo tomadas por el colectivo.

Con respecto al primer de los puntos, Zamit aseguró que el colectivo está dispuesto a aumentar su jornada laboral. «Entendemos que España está pasando un mal momento», aseguró, pero precisó que las 1.750 horas de jornada que marca la nueva ley es «excesiva».

El portavoz recordó que la media de horas de trabajo comunitario ronda las 1.300 horas y relacionó el aumento de jornada con el incremento de las bajas laborales, ya que también se han recortado los descansos. «Esto es lo que está rompiendo a la gente», lamentó.

Con respecto a las decisiones de carácter técnico, detalló que «los gestores de AENA no pueden tomar decisiones porque no cuentan con los elementos necesarios para hacerlo» ya que consideró indispensable formar parte de los mecanismos de control para la toma de este tipo de decisiones «que no se pueden hacer desde un despacho», insistió.

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