El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, aseguró hoy que elevar de 15 a 20 años el periodo para el cálculo de las pensiones «traería más equidad» al sistema, ya que la norma actual penaliza a quienes pierden el empleo en la última parte de su vida laboral.
En declaraciones a RNE, el titular de Trabajo apuntó que si el periodo del cálculo de las pensiones se amplía de un día para otro podría tener una repercusión negativa sobre la cuantía de las prestaciones, por lo que se mostró favorable a que el cambio sea progresivo en el tiempo.
En cualquier caso, recordó que ese plazo ya se ha ampliado en otras ocasiones y que no sólo no ha sido una «catástrofe», sino que le ha dado «más solidez» a la Seguridad Social.
Al ser preguntado por la enmienda socialista a la reforma laboral mediante la cual se pretende rebajar de 100 a 30 días el periodo durante el cual un parado puede rechazar cursos de formación sin ser sancionado, el ministro dijo «no entender el revuelo» que se ha generado al respecto ya que, a su juicio, la medida es «razonable» dado que su objetivo es hacer que los desempleados «estén parados el menor tiempo posible».
El ministro explicó que son los Servicios Públicos de Empleo los que se encargan de llamar a los parados para ofrecerles cursos de formación y que si no les llaman no serán sancionados.
Asimismo, aclaró que no habrá cambios en la legislación por rechazar ofertas de empleo porque «ya se sanciona a quien no acepte una oferta de trabajo».
No obstante, Corbacho se mostró partidario de aumentar el control de estos servicios para evitar que haya fraudes en las prestaciones por paro.
Preguntado por los apoyos políticos que espera para sacar adelante la enmienda, el ministro descartó los votos del PP por ser «absolutamente irresponsable» y «muy poco serio», a la vez que se mostró convencido de que «partidos más serios como el PNV o CiU» apoyarán la medida.
