El director del Instituto Internacional de Estudios Laborales de la Organización Laboral del Trabajo (OIT), Raymond Torres, asegura que la recuperación económica de España es un desafío más complicado que en otros países, si bien tiene la capacidad suficiente para reaccionar.
Así lo declaró este lunes durante el acto de presentación del informe «Promover empleos de calidad en España», en el que también ha estado presente el director de la oficina de la OIT para España, Joaquín Nieto.
El citado informe, elaborado por la OIT y en el que también han participado agentes empresariales y sindicales, persigue el objetivo del Pacto Mundial sobre el Empleo, que «es la creación de un empleo de calidad», afirmó Nieto.
Para explicar «ese desafío complicado» con el fin de lograr un nuevo modelo productivo para salir de la recesión, Torres se refirió a la burbuja inmobiliaria, además de la crisis mundial, como uno de los principales causantes de esta situación. «La economía siempre se centraba en un sector de baja cualificación y alta temporalidad como es el de la construcción y los salarios sólo subieron un 0,9% por año, lo que indica que se trataba de un modelo desequilibrado», señaló.
Además, las exportaciones de bienes y servicios sólo representan el 25% del PIB, por lo que se aleja bastante de la media comunitaria, situada en un 40%. «Por tanto, este dato muestra que el modelo productivo se basa en una demanda interna», indicó Torres.
No obstante, el estudio transmite un mensaje positivo: España está comenzando a experimentar una recuperación tímida y se está produciendo el cambio a ese nuevo modelo productivo.
Por ello, el informe muestra que España tiene «la capacidad para reaccionar». No obstante, ha de dar una respuesta basada en seis pilares.
SEIS MEDIDAS PARA MEJORAR LA ECONOMÍA
En primer lugar, hay que reformar el sector financiero porque, en palabras de Torres, «las empresas no consiguen créditos para realizar inversiones».
El segundo eje consiste en llevar a cabo políticas que faciliten la internacionalización de la economía española así como la creación de empresas.
Un Plan de Choque sería la tercera medida orientada a los jóvenes, que aporte garantías para que todos encuentren trabajo, continúen su formación u obtengan un empleo subvencionado.
Según el informe, por cada orientador laboral, hay un funcionario. Por ello, desde OIT proponen potenciar el Servicio Público de Empleo (SPE) mediante el incremento de orientadores. «En otros países hay un orientador por cada cien desempleados», subrayó Torres.
Como medida contraproducente, Torres apuntó la disminución de los salarios porque «reducen la demanda nacional y suponen un obstáculo para crecer».
Con respecto a la reforma laboral y la negociación colectiva, Torres alegó que «se debería crear un comité de expertos para evaluar y hacer un seguimiento de lo que está pasando en el mercado laboral». «La reforma debería haber sido fruto de un diálogo social», añadió.
«No sólo hay que escuchar la voz de los mercados, sino también, de la sociedad, para conseguir una economía más justa», concluyó.
