El secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, ha afirmado este miércoles que las instituciones europeas «están apretando excesivamente las tuercas» a Grecia, e incluso ha llegado a hablar de «chantaje», cuando lo que necesita es «una reestructuración de su deuda» porque hoy por hoy «es impagable».
Las condiciones que se le quiere imponer para que siga en el euro abundan, a su juicio, «en el debilitamiento de las garantías sociales», ha señalado en rueda de prensa junto al candidato único a la secretaría general –será elegido a partir del 27 de julio– y actual secretario confederal de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), Luca Visentini, con quien ha presentado la estrategia de la CES a fin de promover un cambio de rumbo de la UE. Toxo ha denunciado que el seguir transitando por la vía de la austeridad, más aún en el caso de Grecia, que es de los países «que más ha sufrido sus efectos», es «incompatible» con el inicio de la recuperación económica en la UE. Preguntado por si el Gobierno de Alexi Tsipras está traicionando a su electorado con las concesiones en materia de pensiones realizadas en los últimos días o por si le ha dado menos información de la necesaria sobre cómo se desarrollan las negociaciones en el plano internacional, Toxo se ha mostrado contundente: «Me gustaría a mí que la sociedad española tuviera la mitad de información que la griega». Dicho esto, no ha dudado de que «seguramente hay gente descontenta» en el país heleno, pero también ha defendido que ha habido manifestaciones muy numerosas a favor de su gobierno, «porque la población es consciente de que su país está siendo sometido a un chantaje». «La experiencia griega hay quien considera que no puede tener éxito porque podría contaminar a otros países», ha añadido, para apostillar que «es una pena que alrededor de la posición tan digna de Grecia no se articule un vía alternativa desde Francia o España, que han sufrido en sus propias carnes el resultado de la austeridad». LA CES TAMBIEN RESPALDA A GRECIA. Por su parte, Visentini ha asegurado que la CES se está solidarizando con Grecia, porque en su opinión «no ha malgastado el dinero recibido en los últimos años», sino que su deuda se debe a la «pura especulación». «Grecia ahora tiene que devolver el dinero a los especuladores, muchos de ellos grandes países europeos», ha asegurado. En su opinión, la «mejor solución» pasa por lograr la reestructuración de esta deuda, aunque ha llamado a la prudencia porque para algunas organizaciones internacionales «ello podría suponer que Grecia caiga y sea expulsado del euro». Así, Visentini ha puesto de manifiesto que se trata de un «baile» en el que el 40% de la deuda griega está contraída con bancos alemanes, con lo que la salida del euro sería también un «golpe importante» también para Alemania. «La canciller alemana, Angela Merkel, también tiene que dar respuesta a sus electores, pero tiene que ser consciente de que Grecia está como está no sólo por su propia gestión», ha insistido. Dicho esto, ha pedido «más respeto» por el gobierno griego, del que ha dicho que «no es que no quiera pagar la deuda, sino que ha sido elegido para solucionar el problema de otra manera». A su favor, también ha señalado que «es cierto que hizo promesas electorales» contra la austeridad que estaría incumpliendo, pero ha añadido que «el equilibrio entre llevarlas a cabo y sufrir las presiones europeas para que haga lo contrario es difícil». «No se puede decir que haya mala fe», ha sentenciado Visentini.
