El presidente de la CEOE, Juan Rosell, cree que la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE) es un «problema», pero que está seguro de que «como todos los problemas se resolverá de la mejor manera posible».
Así lo ha señalado Rosell a los medios de comunicación tras la inauguración del seminario ‘El Futuro del Trabajo’, donde también ha apuntado que «hay que esperar para ver cómo se inicia el proceso de salida de la UE». «Va a haber dos años de negociaciones, hay que ver cómo son y de qué manera se van a abordar», ha añadido. Sobre la posibilidad de atraer a las multinacionales con sede en la ‘City’, Rosell ha apuntado que va a haber «competencia» y que las multinacionales de todo el mundo están «todo el día» intentando atraer a las empresas con sede en Londres. La organización empresarial se ha mostrado su disposición para contribuir en la búsqueda de soluciones ante el ‘Brexit’, con el objetivo de que sea una salida «ordenada» y haya un modelo de relaciones «sólido y equilibrado» entre la UE y Reino Unido. Asimismo, se ha mostrado a favor de mantener una colaboración «fluida» con la Administración para buscar soluciones «en tiempo y en forma». De hecho cree que el objetivo «fundamental» del Gobierno tiene que ser el de alcanzar un acuerdo que limite, «lo máximo posible», el impacto negativo en las relaciones que España mantiene con Reino Unido. En un comunicado, CEOE destaca que el nuevo modelo de relaciones bilaterales debe asegurar un equilibrio adecuado entre derechos y obligaciones, preservar la integridad del mercado interior europeo, mantener unas relaciones económicas lo más estrechas posibles entre la UE y prever un periodo transitorio hacia el futuro acuerdo comercial lo suficientemente amplio. También apuesta porque se mitiguen los efectos negativos de la salida de Reino Unido tanto para empresas, como para ciudadanos, que se confiera la necesaria seguridad jurídica lo antes posible y que se mantenga una interlocución regular con las organizaciones empresariales a lo largo del proceso negociador. La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, firmó a última hora del martes la carta mediante la cual el Gobierno británico notifica a la Unión Europea su deseo de iniciar el proceso de retirada de la organización regional.
