Una sentencia dictada en Valencia podría sentar jurisprudencia y desmontar en un futuro no muy lejano el precario modelo laboral en el que asientan multinacionales como Deliveroo, asentadas bajo el paraguas de la economía colaborativa y que al considerar “empresarios” a sus repartidores les obligan a estar dados de alta como profesionales autónomos y hacer frente de todos los seguros sociales. En 2016, la compañía incluía una cláusula prohibiendo a los trabajadores exigir derechos laborales, mientras que a comienzo de año amenazaba con la creación de menos empleo si la UE otorgaba derechos a los repartidores, según recoge Andrea Núñez-Torrón Stock en ticbeat.
Todo parece indicar que la flexibilidad laboral era un disfraz para no brindar cobertura social a sus repartidores: la jueza titular del juzgado de lo Social número 6 de Valencia ha dado la razón al ex rider Víctor Sánchez que denunció a la compañía considerando que ha trabajado como falso autónomo. La Seguridad Social debería haber corrido a cargo de la empresa, según ha detallado el abogado del reclamante Marcos Llerena. Pese a que la magistrada se pronuncia únicamente sobre este caso concreto, se refiere a varias prácticas del modelo laboral de Deliveroo que siguen en vigor y afectan a todos sus repartidores.
La sentencia está basada en las conclusiones de la Inspección de Trabajo de Valencia el pasado mes de diciembre de 2017, que concluyó que los trabajadores son asalariados y no autónomos como indica el contrato con la empresa, por lo que la startup deberá pagar 160.814 euros por las cotizaciones a la Seguridad Social no abonadas hasta dicho momento.
VÍDEO DESTACADO: La hija de Reese Whiterspoon trabaja de camarera en una pizzería