La gente valiente es la que le pregunta a un economista sobre el amor.
A muchos analistas económicos se les pregunta constantemente acerca de previsiones y diagnósticos para los próximos meses. Responden, muchas veces, sin saber, sin conocer el contexto o sin tener todos los datos necesarios sobre la mesa.
Esto nos lo cuenta Tim Harford que ha estado en España promocionando su libro Pregúntale al economista camuflado (Ed. Temas de Hoy). Harford se pone a él mismo cómo ejemplo.
«Es como si a mí, que soy economista me piden un diagnóstico de la situación en España. No conozco el contexto concreto de este país. Si respondo sería lo mismo que aquellos que responden a preguntas personales de otros a los que ni conocen ni saben en qué contexto viven.»
De lo que sí ha hablado tranquilamente es de la crisis. Está convencido de que creará un nuevo tipo de economistas pero, sobre todo, cambiará el modo de ver el mundo entre los más jóvenes.
«La crisis cambiará el concepto que los jóvenes tienen de la política y cambiará su forma de invertir.»
Tim Harford se ha convertido en el economista de cabecera de Europa desde su columna en Financial Times. En ella mantiene correspondencia con sus lectores quienes le preguntan desde cómo saber si un precio es justo, por qué son pobres los países pobres, hasta si se debe o no fingir un orgasmo.
Y eso es lo que más le gusta contar a Harford desde su columna. Responder a las preguntas cotidianas e intimas de la vida desde la perspectiva de un economista.
