La tasa de ahorro de los hogares e instituciones sin ánimo de lucro se situó en el 10,7% de su renta disponible en el primer trimestre, 9 décimas menos que en el mismo periodo de 2009.
Si se toman como referencia los últimos cuatro trimestre móviles, la tasa de ahorro repunta hasta el 18,5% de la renta disponible, tres décimas menos que en el periodo móvil precedente.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, entre enero y marzo la renta disponible de los hogares e instituciones sin ánimo de lucro al servicio de los hogares se estima, en términos absolutos, en 169.211 millones de euros, un aumento interanual del 0,4% (640 millones más).
Este resultado se debió en parte al descenso del 1% de las rentas primarias (ingresos de los hogares).
En cuanto a la distribución secundaria de la renta (prestaciones recibidas o pensiones, menos los impuestos pagados) las prestaciones de los hogares aumentaron el 7,3% y las cotizaciones sociales pagadas disminuyeron el 1%.
Con respecto a la utilización de la renta disponible, el INE destaca que fue el gasto en consumo final de los hogares -que aumentó el 1,4% en este periodo- lo que provocó que el ahorro alcanzase los 18.101 millones de euros, que suponen 1.519 millones menos con respecto al mismo trimestre de 2009.
El ahorro generado por los hogares permitió financiar la inversión de este sector, que disminuyó el 21,8% en el trimestre, y permitió una capacidad de financiación de 5.721 millones de euros, el 2,2% del PIB trimestral.
Por otro lado, la renta disponible de las sociedades no financieras, aumentó el 48,2% en el periodo hasta los 22.516 millones, principalmente por el aumento del 39,8% de las rentas primarias y al impuesto de sociedades, que subió el 14,8%.
El sector registró una necesidad de financiación de 17.346 millones, el 6,8% del PIB trimestral (notablemente inferior al 10,9% que registró en el mismo periodo de 2009).
Por su parte, las Administraciones Públicas redujeron su renta disponible el 7,7% hasta alcanzar los 49.495 millones, sobre todo por los aumentos de las prestaciones sociales (8,8%) y de las rentas netas de la propiedad pagadas por este sector (27,2%), unido a que los impuestos netos percibidos disminuyeron el 0,9%, mientras que las cotizaciones recibidas no cambiaron.
La necesidad de financiación del sector fue de 7.901 millones, el 3,1% del PIB trimestral.
Por último, la renta disponible de las instituciones financieras disminuyó el 46,2% hasta los 5.275 millones, debido al descenso del excedente de explotación bruto (25,3%) y una mayor disminución de las rentas de la propiedad percibidas (30,9%) que las pagadas (26,1%), además de la subida del 15,7% del impuesto de sociedades.
La capacidad de financiación del sector fue de 3.934 millones, el 1,5% del PIB.
Como resultado de todos estos sectores institucionales la economía nacional tuvo una necesidad de financiación frente al resto del mundo de 15.592 millones (3.977 menos que un año antes), cifra que representa el 6,1% del PIB, 1,5 puntos menos que en el primer trimestre de 2009.
La menor necesidad de financiación de la economía española se explica, según el INE, por la disminución en 1.697 millones del saldo de intercambios exteriores de bienes y servicios, y por el mayor aumento de las exportaciones (8,4%) que las importaciones (4,8%).
También por la mejora de la balanza de rentas y transferencias corrientes y de capital, cifrada en 2.280 millones.
