La cadena de supermercados de descuento Lidl, que tiene una red de 521 tiendas distribuidas por todas las comunidades autónomas, prevé invertir en España alrededor de 150 millones de euros a lo largo del ejercicio fiscal en curso (entre marzo de 2010 y febrero de 2011).
Según informaron a Europa Press en fuentes de la compañía, durante el año fiscal cerrado el pasado mes de febrero ya destinó a inversiones 150 millones de euros y este ejercicio espera mantener la cifra en niveles «muy similares».
Entre otros proyectos, la inversión de este año corresponde principalmente a la ampliación de la plataforma logística de Málaga y de sus oficinas centrales en Montcada i Reixac (Barcelona), así como a la apertura de nuevos supermercados.
En concreto, el grupo alemán ha incorporado a su red comercial un total de 31 establecimientos en lo que va de 2010, según las mismas fuentes, que destacaron que su objetivo es «no frenar» el ritmo de inversión y aperturas.
Desde la empresa subrayaron que en el actual contexto de crisis Lidl está ganando cuota de mercado (actualmente tiene una participación del 3,8%) y aún aprecia margen de crecimiento.
Además, afirmaron que continuarán con su política de recorte de precios mediante el ahorro que consiga a través de la reducción de costes.
«Queremos seguir manteniendo el liderazgo en precios», dijeron las citadas fuentes en referencia al ‘Estudio de la cesta de la compra’ presentado recientemente por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que sitúa a Lidl a la cabeza del ‘ranking’ de las cadenas más baratas en la denominada ‘cesta económica’, donde priman los productos de marca blanca, por delante de Alcampo y Carrefour.
La compañía no espera que el año 2011 sea más duro que el ejercicio en curso, pero pronostica que será «igualmente difícil» y no cree que se produzcan «grandes repuntes» del consumo.
Con presencia en el mercado español desde 1994, Lidl factura más de 2.000 millones de euros en España, donde tiene una plantilla integrada por más de 9.500 personas.
