CIMNSA: Los bancos, en su codicia, prefirieron apoyar activamente la operación pese a conocer o intuir su ilicitud
Rafael Gómez Sánchez, ‘Sandokan’, fue detenido el 27 de junio de 2006 en su lujoso chalé de El Brillante, en una de las mejores zonas de Málaga, por su implicación en la ‘Operación Malaya’.
Está acusado de haber entregado 12 sobres con 600.000 euros a Juan Antonio Roca, ex asesor urbanístico de Marbella y cerebro de la trama de corrupción de corrupción urbanística marbellí. A cambio logró la recalificación del uso de los locales comerciales que poseía en el complejo Mare Nostrum, situado en el paseo marítimo de Marbella.
El 27 de septiembre de 2010, Gómez Sánchez se sentó en el banquillo acusado por la Fiscalía por un delito de cohecho por el que le pide una pena de 18 meses de prisión y una multa de 1,2 millones de euros. Dos días después de su comparecencia, el 29 de septiembre de 2010, ‘Sandokan’ es denunciado por el Consorcio Inmobiliario Mare Nostrum por haberles estafado supuestamente 56 millones de euros al venderles una parcela en Cádiz en la que no se puede construir por la calificación del suelo.
[Rafael Gómez nos vendió una] parcela, en primera línea de playa, en Castellar de la Frontera (Cádiz), de nueve millones de metros cuadrados (…) en la que podría construirse una de las mejores urbanizaciones del mundo (…), todo ello a sabiendas de que en aquella parcela nunca se iba a poder llevar a cabo ningún proyecto urbanístico, ya que la clasificación del suelo no lo permitía.
La denuncia se hizo en Barcelona y fue trasladada a los Juzgados de Córdoba, concretamente al Juzgado de Instrucción nº 7 (DP 5993/2010), tras la inhibición de los tribunales de Barcelona, por haberse firmado los contratos entre CIMNSA y Arenal 2000 en la capital cordobesa.
Similar mecánica defraudatoria fue objeto de una querella por parte de Cajasur, donde ‘Sandokan’ utilizó similares artimañas provocando un perjuicio patrimonial a la firma Arenal Sur 21, empresa participada inicialmente por Cajasur y Arenal 2000, que finalmente fue vendida a la Caja cordobesa. A esta denuncia se sumó la Fiscalía Anticorrupción.
Según denuncia CIMNSA, nunca habría caído en el engaño si no fuera por los bancos acreedores de las empresas de Rafael Gómez, quienes [… en su codicia prefirieron apoyar activamente la operación pese a conocer o intuir su ilicitud …]. Por ello la empresa solicita el esclarecimiento de la responsabilidad que hayan podido tener las entidades financieras involucradas.
Según consta en los archivos en la provincia de Córdoba, se están tramitando en este momento más de 200 demandas contra Rafael Gómez o empresas de su grupo.