Rumasa. Legálitas aconseja «cautela», porque el proceso de negociación con los acreedores podría durar tres meses

Legálitas aconsejó este viernes a sus clientes cautela ante la publicación en los medios de la situación de pre-concurso en que se hallan algunas empresas del grupo Nueva Rumasa. En este sentido, señaló que el proceso de negociación con los acreedores podría durar hasta tres meses y tendría por objeto pactar un nuevo calendario de pagos que permitiera la viabilidad de la empresa.

En caso de que en esos tres meses no se alcance por parte de la empresa un acuerdo con los acreedores, se deberá presentar la declaración de concurso dentro del mes siguiente.

En este caso, se tramitará un procedimiento concursal que tendrá como primer objetivo la posibilidad de concertar un acuerdo que evite la liquidación de la compañía.

De no conseguirse, el procedimiento tenderá a la valoración de los bienes existentes, a su reparto entre los acreedores (respetando el sistema legal de preferencias existente) y a su definitiva liquidación.

Legálitas advierte de que no existen Fondos de Garantía de Depósitos o de Inversiones que cubran las posibles pérdidas que puedan producirse.

Finalmente, señaló que, según las noticias publicadas en los medios de comunicación, Nueva Rumasa ha comunicado al Juzgado el inicio de negociaciones previas a la solicitud de concurso; se trata de un paso previo cuyo objeto es evitar el inicio directo del procedimiento concursal. Este procedimiento se regula en el artículo 5.3 de la Ley Concursal y ha sido incluido tras una reciente modificación legislativa.

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