La agencia de calificación Fitch Ratings ha vuelto a confirmar todos los ratings otorgados a Caja Rural del Sur, -un rating del IDR a largo plazo en ‘A-‘, a corto plazo en ‘F2’- por su modelo de negocio, en su zona de actuación con baja dependencia mayorista, con unos muy fuertes niveles de capital, elevados ratios de solvencia, un bajo perfil de riesgo, una elevada calidad de la inversión y una buena rentabilidad».
En una nota de la caja se recuerda que la agencia de calificación destaca la «baja concentración» de la caja en el sector inmobiliario (el 9 por ciento), su elevado porcentaje de operaciones hipotecarias a particulares (el 63 por ciento), así como el porcentaje de morosidad, que a 31 de diciembre era del 4,90 por ciento, «inferior a la media del sector», así como un nivel de cobertura del 93 por ciento, estando la media del sistema financiero español por debajo del 60 por ciento.
De igual modo, Fitch resalta los niveles de liquidez de Caja Rural del Sur, cuya procedencia fundamental son los depósitos de clientes, así como su porcentaje de capital, con un Tier 1 del 16 por ciento, «cuando el mínimo exigido es del cuatro por ciento», siendo el capital principal o ‘core capital’ del 15,9 por ciento frente al ocho por ciento mínimo obligatorio con la nueva normativa.
Fitch destaca la política seguida por la dirección de la entidad en cuanto a control de costes, rentabilidad de las operaciones, el «esfuerzo» realizado por la misma en dotaciones y por su nivel de capital, «superando el doble de lo establecido por el Banco de España», de manera que «todo ello confirma nuevamente su solidez».
La caja rural ha resaltado que «en estos momentos, que todo el sector está realizando esfuerzos para defender su rentabilidad, Caja Rural del Sur comienza una etapa como entidad cabecera del Grupo Cooperativo Interregional, junto a las cajas rurales de Córdoba y Extremadura».
