La joyería estadounidense de alta gama Tiffany obtuvo en el tercer trimestre de su año fiscal, que concluyó el 31 de octubre de 2011, un beneficio neto de 89,7 millones de dólares (67,3 millones de euros), un 62,8% más que los 55,1 millones de dólares (41,3 millones de euros) que ganó en el mismo periodo del ejercicio anterior, según informó la compañía en un comunicado.
Las ventas netas de la firma joyera alcanzaron en el tercer trimestre de su año fiscal los 821,8 millones de dólares (616,5 millones de euros), lo que supone un 20,5% más en comparación con los 681,7 millones de dólares (511,4 millones de euros) que ingresó en el mismo periodo de su ejercicio anterior.
En el conjunto de los nueve primeros meses de su actual año fiscal, Tiffany ganó 260,8 millones de dólares (195,6 millones de euros), un 39,3% más que los 187,2 millones de dólares (140,5 millones de euros) de hace un año. Las ventas crecieron en este periodo un 23,7%, desde los 1.984 millones de dólares (1.488 millones de euros) hasta los 2.455 millones de dólares (1.842 millones de euros).
El presidente y consejero delegado de Tiffany, Michael J. Kowalski, destacó que el incremento de las ventas en todas las regiones contribuyó a mantener el fuerte crecimiento de los ingresos a nivel mundial en el tercer trimestre. Así, adelantó que las ventas en los primeros días del cuarto trimestre están en línea con lo esperado pese a la debilidad registrada en Europa y en el Este de Estados Unidos.
Tras estos resultados, la compañía ha mejorado ligeramente sus previsiones para el conjunto de su ejercicio 2011 y espera un beneficio por acción de entre 3,70 y 3,80 dólares, en comparación con su anterior estimación de entre 3,65 y 3,75 dólares.
