El presidente de Mercadona, Juan Roig, asegura estar «en contra de recortar por recortar» y aboga por adoptar «medidas disuasorias» para «frenar el derroche» existente en sanidad, educación y justicia porque la gente piensa que «todo es gratis». A modo de ejemplo, ha destacado que la decisión «molesta, impopular y arriesgada» de cobrar las bolsas de plástico ha supuesto al país un ahorro de 300 millones de euros, un 0,02 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB).
Así lo ha señalado este miércoles 7 de marzo de 2012 en la presentación de resultados del «mejor año» de su historia, en la que también ha pedido que se «desincentive» el paro, se combata el «absentismo injustificado» que lleva a «tirar a la basura» 18.000 millones de euros en España al año y que se trabaje «mejor y más» para lograr aumentar la productividad del país por su relación directa con el nivel de vida.
En su opinión, la salida de la crisis pasa por que los 47 millones de españoles cambien de actitud, piensen «más en los deberes que en los derechos» y asuman que el éxito depende de cada uno de ellos, de que la cultura del esfuerzo y del trabajo destierre a la del «maná». En ese sentido, ha comentado que «en España hay 7.000 bazares chinos» y que «cada vez hay más porque hacen la cultura del esfuerzo que nosotros no hacemos», a lo que ha agregado que sienten «gran admiración» por esos comercios y que han «aprendido mucho» de ellos.
«El nivel de vida y la productividad se van a equiparar, así que o sube la productividad del país o baja el nivel de vida», ha subrayado Roig, quien considera que si todos los españoles adoptan medidas y decisiones «valientes», aunque sean «molestas e impopulares», incluso «sobra dinero para salir» de la crisis actual.
Roig ha remarcado que «nadie» se libra de haber contribuido a la situación en la que está el país, a la que ha llegado tras haber «derrochado muchos recursos en corrupción, en economía sumergida, en subvenciones improductivas –a su juicio las subvenciones son el cáncer de la productividad–, en absentismo injustificado –con más de 1.000 personas que hoy no han ido a trabajar pudiendo– y al no desincentivar el paro».
Al sector público, también le reprocha haber hecho «inversiones faraónicas» y «gastos superfluos» y sobre todo, el «derroche» alcanzado en los últimos años «gastando por arriba –de los ingresos– y cubriéndolo siempre con más déficit».
«EN ESPAÑA NOS HEMOS PASADO 20 PUEBLOS Y EN LA COMUNITAT 25»
«En España nos hemos pasado 20 pueblos y en la Comunitat Valenciana, 25», ha reconocido el empresario, quien subraya que «toca tomar medidas» y se muestra «totalmente a favor» de la reforma laboral. «Yo hubiera ido más lejos», ha agregado Roig, que reivindica que «hay que favorecer a los empresarios, que son los que crean puestos de trabajo», y señala que él habría «perseguido mucho más el absentismo», pasado a lunes «todos los festivos» porque «cada puente nos cuesta 1.200 millones de euros» y que «hay que desincentivar el paro porque hay muchísimo trabajo posible». «En España nadie recoge las naranjas ni las fresas, todo son extranjeros», ha agregado.
«Si tomamos medidas, en 2013 mejoraremos y si no, estaremos peor que estamos», ha remarcado Roig, que alerta de que se puede estar peor e insiste en que «si los 47 millones –de españoles– tomamos medidas nos sobra dinero y si no, nos vamos al carajo».
Respecto a la situación de la Comunitat Valenciana, admite que «se han hecho cosas muy mal» y lamenta haber «perdido las dos cajas y el banco», aunque descarta entrar en Banco de Valencia «a nivel Mercadona» con independencia de lo que haga «como inversor privado». En cualquier caso, ha resaltado que hay «muchas empresas con ganas de trabajar» y considera que los bancos «tienen que facilitar esas inversiones» que quieren hacer las «muchas» compañías que van bien.
¿QUÉ PUEDO HACER YO POR ESPAÑA?
Mercadona creó 6.500 empleos fijos en 2011 –20 al día–, anuncia otros 2.000 nuevos puestos en 2012 y tiene 70.000 personas en plantilla y hasta 400.000 dentro de su cadena de valor, el 2 por ciento del total de trabajadores en España. A su presidente, le «gustaría ser recordado» por invitar a los ciudadanos a preguntarse ‘¿Qué puedo hacer yo por España?’ y a «pensar en deberes y no en derechos» para superar la «profunda» crisis actual.
Por su parte, se muestra partidario de que paguen más quienes más tienen y «totalmente a favor» de la subida de impuestos e incluso de aumentar el IVA si realmente es necesario, a pesar del posible perjuicio al turismo y de que se paga «una burrada» en tributos.
Preguntado por la trascendencia que ha adquirido como gurú empresarial, Roig ha sido tajante: «Yo me siento como hijo de porquero. Mi padre tenía unas porcateras y yo soy hijo de porquero y mis hijas son nietas de porquero, y de lo que trato cada día es de levantarme, trabajar y hacer mejor las cosas».