El director de fabricación de Ford España, Antonio Adés, se ha mostrado este 8 de marzo de 2012 partidario de que se reduzcan las vacaciones de los trabajadores en este país ya que, en su opinión, «son excesivas» y ha añadido:
«Habrá que trabajar más por menos».
Así lo ha indicado Adés en su intervención durante la jornada «La Comunidad Valenciana en la salida de la crisis», organizada por Deloitte con la colaboración de la patronal valenciana.
El directivo de Ford ha repasado las inversiones que se han llevado a cabo en la factoría de Almussafes, la última de más de mil millones de euros, y ha destacado que la flexibilidad laboral y de producción es uno de los factores que hacen a Ford Europa apostar por la planta valenciana.
Aun así, en su opinión, Ford Almussafes es «todavía caro en mano de obra» y ha hecho hincapié en que el factor de «paz social» es muy importante para ser «ganadores» en la UE respecto a la adjudicación de proyectos.
Concretamente se ha referido al «acuerdo de inversión» que se logró con UGT y ha recordado que hace unos años, la factoría de Almussafes aparecía mucho en los medios por su conflictividad laboral y la media docena de organizaciones sindicales presentes en ella. Adés ha valorado que la Unión General de Trabajadores haya logrado finalmente la mayoría en el comité de empresa.
También se ha referido a la negociación de los distintos convenios colectivos en los que se ha logrado no incrementar desde el año 2000 el complemento de horas extra.
Sobre los salarios, ha puesto como ejemplo que en Ford Almussafes, si se partiera de 100 euros en el año 1980, en 2010 se habría llegado a los 732 euros, de los que 350 son en concepto de IPC, 110 por mejoras del convenio y los 170 restantes se deben «a que los sindicatos son muy creativos», en referencia a mejoras logradas en las negociaciones.
Adés ha explicado a los asistentes a esa jornada una visita que realizó en 2005 a una planta de Mazda en Hiroshima (Japón) y comprobó que se trabajaba veinte días más al año, se tenía un absentismo de un 1 % frente al 7 % que había ese año en Almussafes y así como «un ritmo de trabajo de marcha» más rápido que en España, y se eliminaban «los desperdicios».
Esto último es, a su juicio, fundamental en cualquier empresa y se trata de «eliminar todo aquello que el cliente no está dispuesto a pagar».
Respecto al absentismo laboral, ha indicado que ahora en Almussafes está en un 3,5 %, y ha señalado que este bajó cuando se redujeron de tres a dos los turnos de trabajo por, en su opinión, «el efecto miedo».
Para Adés, la salida de la crisis pasa necesariamente por «una reducción de costes laborales» que puede lograse con una reducción de salarios y beneficios, un incremento del tiempo de trabajo sin aumentar los salarios y la mejora de la productividad.