Sánchez Galán espera que el Gobierno Rajoy sea racional con la reforma energética
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez-Galán, cree que las empresas ya han hecho «un esfuerzo enorme» en los sacrificios solicitados por el Gobierno para acabar con el déficit de tarifa, hasta el punto de que en la actualidad la compañía que dirige paga más en impuestos que en gastos de personal.
Los diversos impuestos en vigor en el país «superan en un 30% nuestro coste de personal», afirmó Galán tras la presentación de resultados del grupo.
Según el directivo, los tributos se han «más que duplicado» durante el trimestre, no solo debido a la situación en España, sino también a una carga adicional de 42 millones relacionada con los nuevos programas de eficiencia en Reino Unido, explicó la compañía.
Un Gobierno «racional»
En el caso concreto de España, explicó, Iberdrola ha sufrido un recorte del 20% en su retribución de redes y ha afrontado un gasto de 122 millones en el primer trimestre relacionado con los nuevos impuestos del 7% a la producción eléctrica y a la actividad nuclear e hidráulica.
En total, incluido su negocio internacional, la eléctrica paga 464 millones millones de euros en tributos, sin incluir el impuesto de sociedades, frente a los 434 millones en concepto de personal.
Así, el directivo considera que «la mayor parte del esfuerzo pedido a las compañías en generación y distribución ya se ha hecho» y recordó que, en esta segunda actividad, la retribución que reciben las empresas en España es muy inferior a la media de la Unión Europea.
Por eso, espera que el Gobierno haga «algo racional» en las nuevas reformas del sector energético que prepara para junio. «Este Gobierno se ha encontrado una situación complicada y ha tomado medidas, algunas racionales otras no tanto», ha afirmado el presidente de Iberdrola, quien ha añadido que se mantienen «conversaciones muy directas» con el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal.
Más desinversiones
Por otra parte, Sánchez-Galán anunció que se llevarán a cabo nuevas desinversiones en los próximos meses y aseguró que prevé completar con éxito su plan de vender activos no estratégicos por 2.000 millones antes de finales de 2014.
Para esto, Iberdrola debe desprenderse de bienes valorados en 900 millones, tras haber vendido ya activos por 1.100 millones de euros. «Los planes se van a llevar a cabo y se llegará a la cifra de 2.000 millones de desinversión» al cierre del periodo del actual plan estratégico.
«Somos un poco germánicos, y los planes hay que llevarlos a cabo», afirmó Galán al ratificar el compromiso de Iberdrola con sus objetivos estratégicos. Durante el segundo trimestre del año, la empresa espera cobrar buena parte de las operaciones de venta ya cerradas.
En cuanto al beneficio, para el conjunto del ejercicio 2013, esperan que se sitúe en niveles similares a los del pasado año, cuando ganó 2.840,7 millones de euros, mientras que en 2014 también está previsto mantener la misma tónica, hasta el punto de que, al cierre del periodo, las ganancias serán similares a las de 2011.