Luis de Guindos llama "rescate" a lo que hace un año llamó "crédito en condiciones favorables"
Este 9 de junio de 2013 se cumplió un año del rescate europeo a la banca española. Sin embargo, desde el Gobierno se han resistido todo este tiempo en pronunciar la palabra «rescate».
El propio ministro de Economía, Luis de Guindos, optó por llamarlo crédito en “condiciones favorables”. Ahora, por fin, Guindos ha pronunciado la palabra prohibida.
Lo ha hecho en una entrevista con Ana Pastor en el Programa ‘El Objetivo’, de la Sexta, que bajó en audiencia respecto al domingo anterior, quedándose alrededor del 10% de share:
«España tuvo que pedir una asistencia, rescate bancario, le acepto absolutamente el tema».
A renglón seguido y consciente de sus palabras, agregó que «la terminología no es lo importante, sino el contenido»:
«Hace un año, nadie se creía las cuentas de los bancos españoles».
Admitió el ministro que la fusión de las siete cajas de ahorros que dio como resultado la creación de Bankia y la posterior salida a Bolsa de la entidad fueron «un error», apostillando que Bankia es hoy «mucho más solvente» y está «mucho mejor gestionada» que antes.
Ha descartado que el Gobierno vaya a subir tipos del IVA como en 2012, pero ha abierto la puerta a «ajustes menores y marginales» en algunos productos no importantes.
El ministro de Economía ha comentado que los desahucios constituyen un «fracaso social», que las participaciones preferentes no tendrían que haber sido colocadas a «ahorradores normales», al tiempo que ha opinado que la destrucción de empleo se está moderando gracias a la reforma laboral.
El hecho de que haya familias «de buena fe» que pierden su casa en «un entorno donde hay 700.000 viviendas vacías» es un «fracaso social, y ahí es donde debe actuar el Gobierno», ha dicho el ministro, quien ha recordado que en los últimos meses se han evitado 2.000 desahucios gracias a las medidas tomadas por el Ejecutivo.
En cuanto a las participaciones preferentes, De Guindos ha admitido que nunca debían de haberse vendido a «ahorradores normales«, pues son un producto «muy difícil de entender».
De Guindos ha afirmado que las entidades financieras deben recortar el crédito a las «inmobiliarias y constructoras» y no al resto de las empresas.
Estamos «en un proceso de reestructuración» (en el sector financiero), ha recordado el ministro, para quien, tras la burbuja crediticia que se dio con el boom inmobiliario en España, «es lógico» que ahora se rechacen ocho de cada diez solicitudes de crédito a las entidades rescatadas.
Respecto a las perspectivas de crecimiento, el ministro se ha mostrado optimista pues, ha dicho, los indicadores adelantados de 2013 «son mejores que los del año precedente».
A su juicio, si antes España ganaba competitividad destruyendo empleo, ahora lo hace «a través de la flexibilidad interna y la moderación salarial».
«Esta es la vía adecuada. Esto es como el colesterol: hay uno bueno y uno malo, y ahora estamos empezando a acumular productividad de la buena y empezando a reducir productividad de la mala: la destrucción de empleo».
De Guindos ha afirmado que la destrucción de empleo se está moderando gracias a la reforma laboral:
«Aunque los españoles aún no noten la mejora, se están sentando las bases para la reducción del paro».