En los últimos meses se multiplican en España la presentación de informes y estudios, las jornadas sectoriales y las publicaciones periodísticas sobre la energía. El debate en torno a la misma, a su producción, a cuánto pagamos por ella y a los planes del Gobierno cobra cada vez más fuerza. Periodista Digital ha vuelto a organizar, el 22 de octubre de 2013, una tertulia para tratar este asunto.
Han participado la especialista en energía de ‘El Economista’, Lorena López, y Juan Castro Gil, secretario de la asociación de productores de fotovoltaica ANPIER, una organización muy crítica con el Ejecutivo.
EXTRACTOS DE LA TERTULIA
Juan Castro-Gil
Los proyectos fotovoltaicos auspiciados por el gobierno español, sin género de dudas, en 2014 van a entrar en concurso de acreedores.
El ministro de Industria nos garantiza que nos van a dar una rentabilidad del 7%, lo cual es falaz
La mecánica de este Gobierno, el anterior y el entorno de la energía convencional es crear un montón de falsedades para atemorizar a la gente.
Pueden desaparecer todas las plantas fotovoltaicas, todas las plantas eólicas y todas las plantas termosolares que hay enEspaña, que nadie tenga duda que que el déficit te tarifa va a seguir.
Tiene que existir una competencia real, que es evidente que no existe.
Ya nos gustaría al sector de la fotovoltaica poder negociar.
El déficit de tarifa es contable, virtual, no es real.
Lorena López
Si el amparo que les queda a los pequeños productores fotovoltaicos es que la banca les va a dar una solución, yo no me fiaría mucho
Puede ocurrir que a partir de enero, los productores [de fotovoltaica] tengan que pagar al Estado.
Los productores están ingresando un ahora un dinero que no saben si en enero van a tener que devolver al Estado.
La propuesta energética de FAES defiende que sean las renovables las que paguen al gas.
El déficit de tarifa se creó porque a los sucesivos gobiernos les genera mucho desgaste subir el recibo de la luz.
Si hubieran sabido que el Gobierno iba a romper el BOE, [los productores de fotovoltaicas] no se hubieran metido.
Se ha llegado a una situación de coste energético muy alto, hay que arreglarlo, negociar y no cortar.
