Los bancos acreedores de Martinsa-Fadesa han acordado instar a la inmobiliaria a presentar cuanto antes una nueva propuesta de convenio, con el fin de esquivar el riesgo de liquidación que afronta la empresa, que no puede atender al pago anual de deuda correspondiente a este año.
Así lo convinieron todas las entidades financieras acreedoras de la compañía que preside y controla Fernando Martín en la reunión que mantuvieron este viernes en Madrid, según informaron a Europa Press en fuentes del sector.
La reunión de bancos acreedores de Martinsa, que suma un pasivo de 3.400 millones de euros, tiene lugar después de que hace unas semanas rechazaran el último plan de reestructuración de deuda presentado por la empresa, al considerar que no es mucho mejor que la liquidación de la compañía.
Este plan incluía quitas de hasta el 80%, un programa de canje de activos inmobiliario por pasivo, y pagar en efectivo un porcentaje de la deuda ínfimo y en un periodo de diez años.
De su lado, Martinsa-Fadesa pretende convenir con los bancos una modificación del convenio de acreedores con que en marzo de 2011 logró superar el que constituyó el mayor concurso de la historia empresarial española.
La compañía no puede afrontar el pago de deuda que este convenio fija para el 31 de diciembre de 2014, equivalente al 23% del pasivo. Toda vez que la empresa aún no ha abonado el importe de 2013, el impago del de este año supondría entrar en supuesto de liquidación.
PATRIMONIO NEGATIVO.
Además, Martinsa presenta un patrimonio negativo y el Gobierno aún no ha manifestado si antes de que concluya el ejercicio renovará por un año más el cambio legislativo que aprobó hace unos años para eximir de la liquidación a las inmobiliarias con patrimonio negativo a consecuencia de la depreciación de sus activos.
Por todo ello, la quincena de bancos acreedores de Martinsa ha convenido por unanimidad la «imposibilidad» de logar un acuerdo en función de la última propuesta de la empresa, e instar a la compañía a «presentar de inmediato una oferta mejorada», según indicaron dichas fuentes.
En este sentido, la inmobiliaria comunicó este miércoles a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que sopesa acogerse a la última reforma de la Ley Concursal, la aprobada por el Gobierno el pasado mes de septiembre, para modificar su convenio de acreedores y que ya «está trabajando sobre una propuesta de modificación de convenio de acreedores vigente».