El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha reivindicado que los intereses de la entidad se alinean con los de los contribuyentes españoles, al considerar «falaz» contraponerlo, mientras que ha negado con rotundidad que se planteara dejar su puesto en el banco ante las negociaciones sobre el reparto de los coste por las indemnizaciones por la salida a Bolsa.
«Contraponer el interés de los contribuyentes y de Bankia es falaz», ha enfatizado en la presentación de resultados correspondientes a 2014, para después recordar que el Estado controla a través de BFA el 62,6% de Bankia. Goirigolzarri ha estimado que cada diez céntimos de incremento en la acción de Bankia elevarían el valor en Bolsa de la entidad en unos 1.151 millones de euros, de los que unos 714 millones se corresponderían con la participación del Estado. «Que Bankia vaya bien y genere valor es una gran noticia para los españoles y para los contribuyentes. Buscar y desear que a Bankia le vaya mal es desear que a los contribuyentes les vaya mal», ha afirmado Goirigolzarri, si bien ha aclarado que ha vivido la negociación con las distintas autoridades con «absoluta tranquilidad». El presidente de Bankia se ha mostrado comprensivo sobre las «distintas perspectivas» sobre el reparto de las indemnizaciones, aunque ha admitido «tensiones positivas». El presidente de Bankia se ha congratulado de la «transformación anímica» del equipo de la entidad y de la mejora de la confianza de los clientes, lo que está permitiendo avanzar en el plan estratégico. «Podemos decir con claridad que los contribuyentes participan hoy en un banco sólido rentable y con buenas perspectivas futuras.
