Enagás ha cerrado la adquisición de la sueca Swedegas tras el pago la semana pasada del importe comprometido y considera que el entorno de negocio ofrece indicios para pensar que sus previsiones para el conjunto del año podrían «incluso superarse», indicó el presidente de la compañía, Antonio Llardén, en una conferencia con analistas.
Enagás, que ha comprado al 50% junto a Fluxys la compañía sueca por unos 200 millones de euros, esperar integrar esta operación en sus cuentas a cierre de abril. La compra permitirá elevar de 60 a 70 millones de euros anuales la parte de dividendo procedente de actividades internacionales. Llardén destacó que la transacción «sigue estrictamente» los criterios de Enagás para la realización de operacioens corporativas y que una de las principales sinergias vendrá de la construcción en el Báltico de una planta de regasificación, actividad en la que el grupo español dispone de amplia experiencia. El presidente de la compañía consideró además que los objetivos del grupo para el conjunto del ejercicio «podrían incluso superarse por el efecto de factores como el coste financiero o el tipo de cambio», si bien «aún queda mucho año por delante». Enagás prevé distribuir un dividendo de 1,32 euros por acción, elevar el beneficio un 0,5% e invertir 430 millones de euros durante el ejercicio 2015, así como mantener los actuales perfiles de calidad crediticia. En el primer trimestre del año, el beneficio neto se situó en 100,7 millones de euros, lo que supone un incremento del 1% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
