Ni los empresarios ni nadie, en el sistema capitalista, puede garantizar una demanda de trabajo
Santiago Niño Becerra, catedrático de Economía de la Universidad Ramón Llull de Barcelona, cree que desde ciertos organismos empresariales se está mandando un mensaje a los trabajadores que no es cierto.
«Abaratar el despido» serviría para que los empresarios contrataran más, algo que concretamente en España no se cumpliría.
Según Becerra en España el mercado laboral es algo diferente:
«No dependen tanto de esos parámetros (derechos laborales) sino de que las empresas tengan pedidos, es decir, que haya actividad económica».
Es lo que sostiene este economista en La Carta de la Bolsa: «Demanda de trabajo«.
Cuando España iba bien
Para argumentar esta hipótesis, el catedrático utiliza el siguiente ejemplo:
«Cuando ‘España iba bien’ la tasa de desempleo fue la más baja de la España postfranquista, y sin embargo ni era libre el despido, ni era barato, había huelgas, y las cuotas empresariales de la seguridad social eran las que eran».
Por eso, Becerra cree que está intentando engañar a la población española:
«Pienso que se está vendiendo un mensaje perverso. ‘Si ustedes trabajadores, aceptan peores condiciones de trabajo y más precariedad las empresas contrataremos más. Estarán más fastidiados, pero al menos estarán ocupados’. Cuando ni los empresarios ni nadie, en el sistema capitalista, puede garantizar una demanda de trabajo».
Para finalizar, el catedrático explica:
«España sigue igual: intentando arañar competitividad empeorando las condiciones laborales, abaratando el trabajo. Y no se hace por sadismo, que va. Pura y simplemente es porque ni se sabe ni se puede hacer de otra manera».