Un 54% de las empresas familiares españolas ha aumentado sus contrataciones durante el último año (el 46% en Europa), frente a un cuarto de los encuestados que lo hizo en 2013, según el IV Barómetro de la Empresa Familiar, realizado por KPMG y el Instituto de la Empresa Familiar.
Por su parte, el 38% han mantenido su plantilla en el mismo nivel (el mismo porcentaje que la media europea) y sólo un 8% asegura haber reducido el número de empleados, frente al 16% en Europa.
Según el estudio, el 70% de las empresas familiares españolas manifiesta haber aumentado su facturación, frente al 58% en Europa, y sólo un 12% afirma haber disminuido sus ventas netas (el 16% en la media de la UE).
«La empresa familiar se encuentra en su mejor momento desde la primera edición del Barómetro efectuado en diciembre de 2013. Las expectativas de evolución económica y los principales indicadores de negocio son más optimistas que la media europea y plantean un escenario alentador para el próximo año», según el socio responsable de Empresa Familiar de KPMG, Juan José Cano.
El estudio revela además que los negocios familiares están aprovechando las oportunidades que ofrece la economía global, tal y como demuestra que dos tercios de los participantes (el 66%) afirma que su empresa opera ya en mercados exteriores. Además, un 69% de los mismos ha aumentado su presencia internacional en el último año.
INCERTIDUMBRE POLITICA, PRINCIPAL RETO
Por otro lado, la incertidumbre legal/política, indicada por un 45% de los encuestados, se sitúa a la cabeza de los principales retos que detectan las empresas familiares españolas, seguido de la disminución de la rentabilidad, señalada por un 44%.
En el otro extremo, el acceso a la financiación figura en los últimos puestos de la lista de preocupaciones para las empresas familiares. De hecho, un 86% de los directivos indica no haber tenido problemas para financiarse en los últimos meses. Respecto a las principales fuentes de financiación a las que acuden las empresas, una amplia mayoría (83%) afirma plantearse únicamente la financiación bancaria, el doble que en la pasada edición.
Según el barómetro, un 35% de los negocios familiares que planean acometer cambios estratégicos para el próximo año afirma tener intención de traspasar la gestión de la empresa a la siguiente generación y el 78% está planeando alguna inversión como parte de su plan estratégico.
En un entorno de negocios complejo, el 70% de las empresas familiares considera que la toma de decisiones rápida y flexible es su principal fortaleza y cuatro de cada cinco directivos declaran contar con ejecutivos ajenos a la familia en su plantilla.
OPTIMISTAS DE CARA AL FUTURO
De cara al futuro, el gran nivel de confianza que muestran las empresas familiares en la economía, unido a la destacada mejora de sus indicadores de negocio, permiten que el 79% de las empresas se muestre optimista, frente al 42% de hace dos años. Los directivos destacan, entre sus objetivos futuros, mejorar la rentabilidad e incrementar su facturación, según aseguran el 57% de los encuestados.
El IV Barómetro de Empresa Familiar refleja las respuestas de 184 empresas familiares españolas de todo el territorio nacional recogidas entre mayo y junio de 2015 sobre sus expectativas, retos y preocupaciones a corto, medio y largo plazo.