BILBAO, 7 (EURO`PRESS)
El secretario general de Cebek, Francisco Javier Azpiazu, ha asegurado que el cuestionamiento del Concierto Económico vasco y el Cupo, surgido en los últimos días, se debe a la «ignorancia» o a la «mala fe», y ha defendido ambos elementos como «parte del ADN» de Euskadi y «base» de su autobobierno.
En una entrevista en Radio popular, recogida por Europa Press, Azpiazu ha asegurado que el debate sobre el Concierto económico es «recurrente» en los últimos años y ha recordado que los propios representantes empresariales vascos han debido hacer «un ejercicio de pedagogía para explicar qué es el Concierto» y «dónde están su anclajes jurídicos e históricos». A su juicio, las declaraciones de los últimos días al respecto, «el cuestionamiento del Concierto» y la forma de calcular el Cupo «que paga Euskadi al Estado por los servicios no transferidos y por la ejecución de determinadas políticas que Estado realiza aquí», se han hecho «desde la más absoluta ignorancia», en unos casos, y en otros «de mala fe». Se ha felicitado de que el Concierto sea «afortunadamente», un «valor» compartido» en Euskadi por las instituciones públicas, partidos políticos, organizaciones empresariales y sindicatos, y constituya un elemento «que forma parte del ADN del país». «No está en cuestión ni estará en cuestión, ha advertido. Además, ha recordado que constituye «un ejercicio de responsabilidad y también de riesgo» porque «obliga a una buena gestión recaudatoria y a una buena gestión del gasto». «Lo fácil es que recauden otros y que lo gaste yo», ha señalado. Azpiazu se ha referido también al Cupo, que «no es algo que se impone desde un lado u otro», sino una cuantía «que se pacta». «Creo que el cuestionamiento fuera de Euskadi del Concierto y el Cupo tiene que ver en muchas ocasiones con el desconocimiento, que es muy habitual, y en algunos hay un poco de mala fe», ha afirmado. Por ello considera que «se debe insistir mucho» en explicar «a la sociedad y a los jóvenes» que el Concierto «es la clave del autogobierno en Euskadi, además de «un ejercicio de riesgo y responsabilidad».