Cementos Molins ha obtenido un beneficio neto de 41,9 millones de euros en los nueve primeros meses del ejercicio, un 37,6% más que un año antes, gracias a la aportación del negocio en el exterior, según informó la empresa.
Las filiales internacionales de la compañía contribuyeron con 51 millones de euros al beneficio de este periodo, un 7,5% más, con lo que compensaron los «resultado negativo» del negocio en España. Cementos Molins detalló que la recuperación del mercado doméstico, si bien permitió mejorar los resultados operativos en España en el tercer trimestre respecto a los anteriores, no posibilitó abandonar aún las pérdidas. Por contra, en el plano internacional, la cementera destaca el «excelente» comportamiento de todas las compañías participadas, con la excepción de las ubicadas en Túnez, afectadas «por la situación del mercado». Así, la cifra de negocio total de Cementos Molins progresó un 21,8% entre los pasados meses de enero y septiembre, hasta sumar 473 millones de euros, mientras que el resultado de explotación se situó en 19,07 millones, con una avance del 1,9%. Además de en Túnez, la cementera tiene negocio, a través de firmas participadas, en Argentina, Uruguay, México, Bolivia, Túnez y Bangladesh. DESEMBARCO EN COLOMBIA. Los resultados de Cementos Molins de los nueve primeros meses no tienen aún reflejo alguno del acuerdo suscrito con el grupo colombiano Corona, para entrar en este mercado con la construcción de una planta en el país, dado que la firma tuvo lugar el pasado 30 de septiembre. En virtud del pacto, la cementera pondrá en marcha en Colombia una fábrica para producir 1,35 millones de toneladas de cemento año, que supondrá una inversión de 370 millones de dólares (unos 340 millones de euros) y que está previsto se ponga a mediados de 2018.
