Los hermanos Higini y Ramon Cierco, accionistas mayoritarios de Banca Privada d’Andorra (BPA), han enviado esta semana una nueva carta a la Agencia estatal de resolución de entidades bancarias (Areb) andorrana en la que piden la paralización de la venta de los activos de BPA agrupados en Vall Banc porque, si la completan, los miembros del organismo pueden «incurrir en negligencia grave» y por ello deber responder personalmente ante la justicia.
El 16 de septiembre la Areb ya recibió una carta de los representantes legales de los Cierco pidiendo que se detuviera el proceso de resolución de BPA, pero ahora han tomado la palabra directamente los hermanos titulares del 75% del banco andorrano intervenido desde marzo por presunta vinculación con blanqueo de capitales procedentes del crimen organizado internacional. Lo han hecho después de que el 29 de octubre se abriese el procedimiento de venta de Vall Banc, cuya primera fase finalizó este lunes con la aceptación de ocho ofertas de interés que pasarán a la segunda fase de ‘due diligence’ para decidir si presentan oferta vinculante por la entidad puente que agrupa los activos lícitos de BPA. CADENA DE RECURSOS JUDICIALESLos Cierco recuerdan las diferentes acciones judiciales en curso que han impulsado y que tienen relación directa con la intervención del banco y con su proceso de resolución, como los recursos contra la declaración de apertura del procedimiento de resolución, contra la valoración económica de BPA y contra la creación del banco puente.
También hacen referencia a la reclamación económica de 365 millones de euros al Gobierno de Andorra por los daños y perjuicios causados a los accionistas mayoritarios. Así, consideran un «menosprecio» a la justicia si la Areb ya ha dispersado los activos de BPA en caso de que las resoluciones que se deriven de aquellos procedimientos en curso estiman, aunque fuera en parte, sus impugnaciones y reclamaciones y que ese menosprecio es a su entender un supuesto de negligencia grave. Concluyen que, si no se suspende el proceso en curso, la dispersión de su patrimonio en BPA, que quedará cedido o traspasado a terceros, comportará unos perjuicios que les «obligarán» a exigir responsabilidades personales a los integrantes de la Areb en virtud de lo establecido en la disposición adicional cuarta de la ley 8/2015 de 2 de abril, conocida popularmente como ‘ley BPA’. VENTA INMINENTEPor el momento, los planes de la Areb pasan por haber vendido Vall Banc antes de fin de año, con la apertura de la fase de ‘due diligence’ la próxima semana y la presentación de ofertas vinculantes para finales de mes, han explicado a Europa Press fuentes financieras del Principado.
Entre los ocho ofertantes interesados que han pasado a la segunda fase del proceso figuran los cuatro bancos andorranos –AndBank, Morabanc, Crèdit Andorrà y Banc Sabadell d’Andorra– y ‘fondos buitre’, según las mismas fuentes.
