Coca-Cola Iberian Partners comunicará este miércoles a los comités de empresa su decisión de lanzar un nuevo plan de bajas voluntarias en toda España, que afectará en principio a aproximadamente 120 contratos.
Fuentes de la compañía han subrayado a Europa Press que el objetivo del plan de bajas voluntarias es conciliar el interés de aquellas personas que manifiesten su voluntad de dejar el grupo para modificar o terminar definitivamente su carrera profesional y alcanzar la mayor eficiencia empresarial de la firma. Después de que ayer se presentara la última versión del plan a las Federaciones con presencia mayoritaria en el seno del grupo Coca-Cola Iberian Partners, esta mañana se ha iniciado el proceso de comunicación interno a los comités de empresa. Una vez compartido el plan con los representantes de los trabajadores se hará extensivo el plan a toda la plantilla. Una vez completado el proceso de comunicación interna se abrirá el plazo de solicitud de adhesión al plan en los próximos días. Tras la solicitud a la adhesión por los interesados, corresponderá a Coca-Cola Iberian Partners la aceptación final después de analizar las solicitudes, según criterios de eficiencia y estrategia empresarialEste plan de bajas voluntarias va dirigido a tres colectivos: trabajadores de menos de 58 años, empleados de entre 58 y 62 años y trabajadores de más de 63. La empresa exigirá al menos tres años de antigüedad y la compensación no sobrepasará tres anualidades el coste del trabajador para la empresa.
Los trabajadores tiene de plazo para adscribirse del 11 al 22 de abril y la salida de la empresa se produciría antes del 31 de diciembre, según ha informado el sindicato CSIF, que ha precisado que la compañía ha puntualizado que aunque este plazo se podría ampliar, las condiciones señaladas ya no serían vinculantes para la empresa. CSIF ha considerado esta propuesta «tardía» tras lo sucedido con el reciente Expediente Regulación de Empleo (ERE). En este sentido, estudiará los términos de la oferta y velará porque el plan sea «realmente incentivado» y por tanto pactado con los trabajadores. El sindicato, que ha ofrecido ya su asesoría a los trabajadores para los diferentes casos que se puedan plantear, ha afirmado que defenderá la seguridad jurídica de la plantilla, el carácter voluntario y que no se vuelva a poner en peligro los puestos de trabajo «después de todo el sufrimiento y el coste humano que supuso el todavía reciente ERE». El pasado mes, el Tribunal Supremo puso fin al proceso de reestructuración de Coca-Cola Iberian Partners, al considerar legítimas y ejecutadas conforme a derecho las medidas alternativas al despido que había ofrecido, consistentes en movilidades geográficas y modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo, todas ellas de acogimiento individual y voluntario por parte de los trabajadores afectados. Las medidas ratificadas por el Supremo fueron parte del proceso de reestructuración del grupo permitiendo reducir el número de incluidos en el despido colectivo de 1.169 a 840 trabajadores. Afectaban a 328 personas que aceptaron voluntariamente movilidad funcional y geográfica, de los cuales 21 han dejado la compañía.
