El sector de la consultoría creció un 3% en 2015 y mantendrá su impulso este año y el siguiente

El volumen de negocio de las firmas de consultoría ascendió a 12.650 millones de euros, un 3,1% más que el año anterior, según el observatorio sectorial DBK de Informa D&B, que pronostica un crecimiento de entre el 3% y el 4% para este ejercicio y el próximo.

De este modo, el pasado ejercicio se prolongó la recuperación iniciada en 2014, el que la facturación del sector creció un 2,7%, en un escenario económico favorable y de reactivación de la demanda en los principales sectores de actividad.

La evolución de los ingresos de las empresas en el mercado español experimentó una mejora respecto al año anterior, al contabilizar un aumento del 3,0% (+2,2% en 2014), hasta los 9.550 millones de euros.

El segmento de consultoría en tecnologías de la información, que supuso el 86% del valor del mercado, creció también un 3,0%, mientras que el área de estrategia, operaciones y procesos pasó de caer ligeramente en 2014 a registrar un aumento del 2,7% en 2015.

El negocio en el extranjero, por su parte, se situó en 3.100 millones de euros, lo que supuso un incremento del 3,3%, un punto menos que el contabilizado en el ejercicio 2014.

La positiva coyuntura económica prevista y, en particular, el crecimiento de la inversión empresarial, y la progresiva recuperación del gasto público en proyectos de consultoría se traducirán en un moderado aumento del volumen de negocio del sector a corto y medio plazo.

LOS INGRESOS CRECERAN HASTA UN 4% EN 2016 Y 2017

Según estimaciones de Informa D&B -filial de CESCE- se estima que la facturación sectorial registrará un incremento de alrededor del 3-4% anual en el período 2016-2017, superando en el último año los 13.500 millones de euros.

En 2015 se encontraban registradas para la realización de actividades de programación, consultoría y otras relacionadas con la informática o bien de consultoría de gestión empresarial, un total de 44.500 empresas, un 5,3% más que el año anterior.

Las cinco primeras empresas concentraron en 2015 el 41% de la facturación en España, en tanto que la participación conjunta de las diez primeras se situó en el 58%. Esta última cifra se incrementó cerca de un punto y medio respecto a la contabilizada dos años antes, reflejando el gradual aumento del grado de concentración de la oferta.

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