La promotora residencial Neinor Homes ha dado un nuevo paso hacia la transformación del sector con el lanzamiento de un Código de Buenas Prácticas en la intermediación inmobiliaria, una iniciativa pionera en España, según destaca la compañía.
La medida quiere impulsar la total transparencia entre los intermediarios y la compañía, contribuyendo activamente a defender una intermediación profesional, segura y de calidad; fundamental para la compra de suelo. A través de un contrato que firmará con todos sus intermediarios, Neinor Homes establecerá pautas de transparencia y profesionalidad, que, entre otros objetivos, evitarán la duplicidad de pago de honorarios, fijarán unas comisiones determinadas según el volumen de la operación y comprometerán a ambas partes a actuar de buena fe, aplicando los máximos estándares éticos y obligaciones en materia de prevención de blanqueo de capitales. Asimismo, la promotora advierte que denunciará y hará pública cualquier actuación irregular que detecte. «Nuestra voluntad es la de promover una intermediación inmobiliaria de confianza y profesionalizada, apoyando a todos aquellos actores que ya están comprometidos y son rigurosos con su trabajo. Queremos ayudar a evitar malas prácticas, para así recuperar la confianza de los que quieren comprar una vivienda. Con esta iniciativa queremos seguir aportando nuestro granito de arena para que finalmente podamos operar en un mercado totalmente profesionalizado», ha declarado, Juan Velayos, consejero delegado de Neinor Homes. Este Código de Buenas Prácticas se enmarca en el conjunto de acciones que la compañía ha impulsado para la transformación de la actividad inmobiliaria en España, hacia un modelo más institucionalizado, basado en el cliente, el rigor, la ética y la transparencia. Neinor Homes dispone del mayor banco de suelo finalista de calidad en España, con una inversión por valor de más de 1.120 millones de euros, equivalente a un millón de metros cuadrados, para la construcción de vivienda de obra nueva. Cuenta con una superficie edificable aproximada de 1.250 km2, repartidos entre Madrid, Cataluña, Baleares, País Vasco, Andalucía y Valencia, de acuerdo con los datos facilitados por la compañía.
