Lo explica con mucho detalle Patricia Malagón en ‘Libre Mercado’. La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ha puesto sobre la mesa una propuesta de reforma del RETA que afectaría a los autónomos que ganen menos del Salario Mínimo Interprofesional (fijado en 858 euros) y a aquellos que ganen más de 40.000 euros netos anuales, que son el 30% de los trabajadores por cuenta propia. Dicha reforma pretende cambiar las bases de cotización actuales que solo contemplan dos franjas.
Actualmente, la base mínima de cotización, aquella que tienen que pagar todos los autónomos independientemente de sus ingresos, es de 279 euros. Es decir, el trabajador por cuenta propia que gane 600 euros mensuales gastaría la mitad de su sueldo en cotizaciones a la Seguridad Social, a las que habría que sumar las declaraciones trimestrales de IVA e IRPF. Con este sistema les quedaría un sueldo ínfimo e inferior a los 300 euros mensuales.
Por otro lado, está la base máxima de cotización, que está pensada para aquellos que ganen más de 3.751 euros mensuales brutos. En este caso, pagarían 1.121 euros mensuales a la Seguridad Social más las declaraciones de IVA e IRPF.
Eso sí, la base de cotización se puede elegir libremente (dentro de unos límites) hasta los 47 años. En la práctica esto supone que solo el 14% de los autónomos eligen cotizar por la base máxima.
Este fenómeno se da por la desconfianza en el sistema de pensiones. La diferencia entre la base máxima y la mínima es la cuantía de la pensión de jubilación y una ampliación de las coberturas.
Actualmente, los autónomos que se jubilen y hayan cotizado por la base mínima reciben al mes 788,9 euros (habiendo cotizado 36 años y 6 meses) mientras que los que se jubilen habiendo cotizado por la base máxima recibirán 2.580 euros mensuales.
A pesar de las diferencias entre una y otra pensión, los trabajadores deciden en su mayoría cotizar por la base mínima. El motivo, como se anuncia arriba, es por una desconfianza en el sistema de pensiones público.
Los autónomos de altos ingresos prefieren ahorrar esos 842 euros mensuales entre una base de cotización y otra. Unos deciden guardarlo, otros invertir y otros tener un fondo de pensiones.
La reforma del PSOE
La reforma que plantea el Gobierno de Pedro Sánchez afectaría a los que ganen más de 40.000 euros netos anuales. Estos trabajadores, que representan el 30% de los autónomos, estarían obligados a abonar una base mínima de 1.840 euros mensuales.
Es decir, aquellos que ingresen más de 3.333 euros netos al mes, deberían abonar 1.840 euros a la Seguridad Social. Por su parte, para aquellos que ganen menos del SMI fijado, se estudia una cotización de 50 euros mensuales, la misma que la tarifa plana durante los primeros doce meses.
