No se ha pedido nada más allá de una aceleración de las valoraciones de la banca con ayuda del BCE
El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha reiterado este 15 de mayo de 2012 que el gobierno no ha pedido «en absoluto» un rescate a la Eurozona para la banca.
«No se ha pedido nada más allá de una aceleración de las valoraciones de la banca con ayuda del BCE».
En una comparecencia tras la reunión de ministros de Finanzas de la Unión Europea (UE) en la que se acordó reforzar el capital de la banca para evitar la crisis, De Guindos mantuvo que «la realidad es mejor que la percepción de la realidad».
Además, de Guindos, afirmó que la posibilidad de que la delicada situación económica de Grecia provoque un «corralito» en España es un «sinsentido».
«Lo único que se ha pedido (por parte del Eurogrupo) es si podíamos acelerar el proceso de valoración y también el BCE mostró su interés -y el Gobierno español está absolutamente abierto- en cooperar con el Banco de España, con los valoradores independientes, a efecto de estas auditorías«, ha explicado De Guindos al terminar la reunión de ministros de Economía de la UE.
«El BCE también considera que puede apoyar, cooperar en este proceso de valoraciones a través de su ‘expertise’, de su conocimiento de lo que son los diferentes tipos de activos y por supuesto que el Gobierno español está absolutamente abierto a esta cooperación por parte del BCE».
La aportación del BCE no se limitará a la valoración de los balances sino que también asesorará en «la constitución de las compañías de gestión de activos» que crearan los bancos para segregar el ‘ladrillo‘.
«Ellos van a estar apoyando continuamente los esfuerzos del Gobierno español en el proceso de clarificación y saneamiento de la banca española», ha explicado el ministro, que ha sostenido que esta colaboración «no se hace por contrapartidas concretas».
En este sentido, el ministro reconoció que hay una situación de incertidumbre sobre los balances bancarios, y que la reforma busca precisamente disipar las dudas que existen sobre ellos.
«Los bancos españoles no tienen nada que ocultar; España está abierta a que haya luz y taquígrafos».
«Vamos a intentar primero que Grecia no salga del euro, la voluntad de todos y de la población griega es que no salga», afirmó el ministro español, quien advirtió de que los primeros que sufrirían las consecuencias de un abandono de la moneda única serían los ciudadanos helenos.
De Guindos subrayó que el euro es un «elemento de estabilidad» importante para el desarrollo económico de Grecia, y urgió al país a formar un gobierno «con capacidad de acción que pueda cumplir compromisos».
El ministro español aseguró que las tensiones que viven los mercados de deuda se deben fundamentalmente a la crisis política que atraviesa Grecia tras las elecciones generales celebradas el pasado 6 de mayo y los sucesivos fracasos para formar un ejecutivo de coalición.
«La situación de la prima de riesgo es inaceptable en estos momentos», afirmó, un día después de que el diferencial entre el bono español y el alemán tocara el récord de los 492 puntos.
Por último, el ministro de Economía ha eludido pronunciarse sobre si la participación del BCE supone una desautorización del Banco de España y de su gobernador, Miguel Ángel Fernández Ordóñez.
«No voy a hacer ningún juicio de valor sobre cuestiones del pasado. Tenemos una situación que es la que es. Existe incertidumbre en estos momentos sobre la valoración de los activos incluidos en los balances bancarios».