El Gobierno no gana para sobresaltos en las últimas semanas, aunque el de este 21 de agosto de 2012 lo han provocado dos de sus miembros a cuenta de la próxima reforma eléctrica.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, fue el encargado de encender la mecha discrepando en una entrevista a Bloomberg sobre algunos aspectos de dicha reforma aseverando incluso seguiría adelante cuando él lo decidiese.
La respuesta del ministro de Industria, José Manuel Soria, no se hizo esperar y en una rueda de prensa recordó que «las competencias en el seno del Gobierno están muy bien delimitadas y cualquier tipo de propuesta o medida en materia de reforma energética corresponde al Ministerio de Industria sin perjuicio de que hay otros departamentos, fundamentalmente de contenido económico, que lógicamente tienen que opinar».
De todos modos, insistió en que la reforma «está hecha, está diseñada por el Ministerio de Industria, Turismo y Energía», aunque reconoce que posteriormente deberá ser aprobada «de manera colegiada por parte de todo el Gobierno».
Tras el rifirrafe, el PSOE entró en escena para afear las disputas entre ministros porque causan «desconfianza» en la economía española en un momento donde todas las miradas están puestas en el país.
El portavoz socialista de Hacienda en el Congreso, Pedro Saura, responsabilizó a Mariano Rajoy de la «descoordinación» del Gobierno y le pide una única autoridad económica.