La línea de crédito no es fundamental, es circunstancial; solo la condicionalidad es clave
El Gobierno de Mariano Rajoy habría encontrado la fórmula mágica para activar la compra de bonos del BCE.
Según informa el Financial Times este 16 de octubre de 2012, España ya está lista para pedir el rescate empleando la línea de crédito que Bruselas ha puesto a su disposición. Eso sí, ni tiene prisa por hacerlo ni necesita el dinero.
De acuerdo con el rotativo, que cita a una fuente oficial del Ministerio de Economía, España no precisa fondos del mecanismo de rescate europeo, pero «se sentiría cómoda pidiendo una línea de crédito», con lo que cumpliría el requisito impuesto por el Banco Central Europeo para que éste active su programa de compra de bonos.
Como explicó recientemente Benoit Coeure, miembro del Comité Ejecutivo del BCE, el instituto emisor está dispuesto a poner en marcha la compra de bonos soberanos en cuanto Moncloa firme un acuerdo con Bruselas y sin esperar a que el dinero del MEDE sea desembolsado de forma efectiva.
«Lo que el BCE buscará será un programa de asistencia del FEEF o el MEDE para asistencia preventiva con una posibilidad de compras en el mercado primario».
Esta opción, según apunta el rotativo británico, es válida para el Gobierno español, que quiere evitar a toda costa el estigma que supondría la solicitud de un rescate completo.
Sin prisa
Llegados a este punto, «que supone un movimiento significativo desde el verano», según apunta el FT, la petición formal de dicha línea de crédito está siendo aplazada solo factores externos al país.
En concreto, hace referencia a la necesidad de evaluar cómo impactaría a otros países de la región, como Italia, y a evitar posibles perjuicios.
La falta de acuerdo entre las autoridades españolas sobre cómo minimizar la repercusión negativa, junto con las distintas presiones por parte de los socios europeos, están detrás del retraso del Gobierno de Rajoy para recurrir a la ayuda del BCE.
Por ahora, el Ejecutivo ha dejado claro que quiere asegurarse de cuáles serán las condiciones bajo los que el supervisor tenderá su mano y que la relajación de la prima de riesgo de los últimos días concede margen para esperar y concretar los términos.
Rajoy solo pedirá el rescate si la prima de riesgo se desboca.
«El Gobierno no considera que deba hacer ningún movimiento inmediato», asegura la citada fuente de Economía, que insiste en que España no hará ningún uso de los fondos que habilite Bruselas.
«La línea de crédito no es fundamental, es circunstancial; solo la condicionalidad es clave».