Además pide que se suba el IVA y se mejore la productividad / España crecerá en 2017 crecerá un 3,1% frente al 2,6% previo
Las clásicas recetas del FMI para España (subida del IVA y mejora de la productividad) incluye la novedad en materia de pensiones y pide que la profundización de la reforma de las pensiones sea más solidaria entre generaciones para repartir la carga entre los futuros pensionistas y los actuales.
Además, subraya que la media de las pensiones estarán respecto al salario estará por encima de la UE en los próximos 30 años pero pide que se alargue la edad de jubilación y se fomente un sistema de ahorro sostenible.
El FMI ha dado a conocer sus conclusiones iniciales tras la revisión anual de rutina que la institución ha realizado a nuestro país bajo el Artículo IV que rige a sus 189 miembros.
El equipo liberado por Andrea Schaechter, destaca la «impresionante» expansión económica y laboral de España al mismo tiempo que apunta que el PIB debería haber sobrepasado niveles pre-crisis en el segundo trimestre del año. «Gracias a las reformas, la economía se ha vuelto más competitiva, flexible y resistente», señala el documento.
Con una economía que este año debería crecer un 3,1%, frente al 2,6% previamente estimado y muchas probabilidades incluso de superar esta meta, la carga de la deuda privada es mucho más manejable y el sector bancario, que ha sido analizado paralelamente como parte del Programa de Asesoramiento del Sector Financiero (FSAP, por sus siglas en inglés), es más fuerte.
Aún así, España sigue enfrentando retos, sobre todo si quiere evitar el debilitamiento de su crecimiento en los próximos años y contar con el margen de maniobra suficiente para enfrentar futuros shocks.
Uno de los más importantes para el Fondo es el futuro de las pensiones. Elogia las reformas del sistema que garantizan la estabilidad financiera del sistema y aumentos anuales a las pagas nominales de todos los pensionistas. Como resultado de ellas, se garantiza que en los próximos 30 años, la pensión media de un pensionista español relativa al salario medio de la economía seguiría siendo muy superior a la media de la UE.
Una reforma socialmente aceptable
Pero el organismo pide aún más cambios para asegurar la transición continua y sin tropiezos a un sistema de pensiones sostenible y socialmente aceptable. Por primera vez demanda que la carga de la reforma debe repartirse entre generaciones. El coste de los anteriores retoques lo soportan los nuevos pensionistas con el alargamiento de la edad de jubilación y la entrada en vigor en 2019 del nuevo factor de sostenibilidad.
Para el Fondo, una reforma más equilibrada puede lograrse con medidas que incentiven una vida laboral más larga y fomenten el ahorro suplementario. «Es esencial que las reformas se apliquen completamente y se eviten ajustes únicos, como en la tasa de indexación de las pensiones», inciden desde la institución al mismo tiempo que dejan claro que «la plena transparencia sobre cómo se logrará la sostenibilidad financiera del sistema de pensiones y las implicaciones que esto tendrá en los ingresos de la jubilación será fundamental».
Problemas de la economía
A ojos del Fondo, la deuda pública y el desempleo estructural siguen siendo elevados, el envejecimiento de la población está creando presiones fiscales y la productividad es inferior a la de sus homólogos de la UE. Además, la posición neta de España con respecto a la del resto del mundo sigue siendo alta y el ajuste del sector financiero y las nuevas reformas para fortalecer y modernizar los mecanismos institucionales aún no se han completado.
Desde el punto de vista fiscal, Schaechter y su equipo estiman que un ratio de deuda pública cercano al 100% del PIB, no existe mucho margen para usar políticas fiscales en caso de un inesperado azote. Paralelamente, la dinámica demográfica de la población española implica un aumento significativo del gasto relacionado con las pensiones a medio plazo. «Mantener el ritmo de ajuste gradual establecido para 2017 hasta que el presupuesto estructural esté en equilibrio reconstruiría los colchones fiscales más rápido, acelerando la reducción de la deuda», explican.
Para el FMI, la restricción presupuestaria prevista para 2018 contribuirá de manera importante a reducir el déficit, exigiendo la aplicación de las reglas de gasto a todos los niveles gubernamentales. Como es costumbre, la institución destaca que el IVA en España sigue siendo significativamente más bajo en porcentaje del PIB que en otros países europeos, en parte debido a que gran parte del consumo que se beneficia de los tipos reducidos.
De ahí que se recomiende elevarlos gradualmente a niveles estándar para conseguir no sólo recursos para disminuir la deuda sino también la posibilidad de proteger adecuadamente a los grupos vulnerables.
Del mismo modo, los impuestos y gravámenes medioambientales de nuestro país debería estar más en línea con el resto de la UE mientras las autoridades también pueden trabajar para reducir las ineficiencias del sistema fiscal.
Más flexibilidad en el mercado laboral
Sobre el mercado laboral, y con una tasa de paro que en el primer trimestre se situó en el 18,8%, por debajo de la cifra registrada en el mismo periodo de 2010, el FMI señala que las tasas de desempleo juvenil y de larga duración siguen estando entre las más altas de Europa, las contrataciones temporales han seguido superando a las permanentes y el empleo a tiempo parcial involuntario se ha mantenido elevado.
«Fomentar un mercado de trabajo dinámico y saludable que ofrezca oportunidades de empleo para todos los segmentos de la sociedad requiere un enfoque holístico».
De ahí que mantener la competitividad de la economía juegue un papel clave y para ello se deben garantizar condiciones laborales flexibles en función de las condiciones específicas de la empresa y del sector, así como abordar la cuestión de la dualidad del mercado de trabajo. Según el FMI, las políticas activas de mercado de trabajo bien diseñadas pueden desempeñar un papel más importante para ayudar a los jóvenes poco cualificados y los desempleados de larga duración a regresar al mercado laboral.
A medio plazo, la jefa de la Misión del Fondo y su equipo recomiendan implementar políticas que fomenten la competitividad y que apoyen la capacidad de las empresas a crecer e innovar, especialmente entre las startups. «Los niveles de productividad en los sectores de fabricación, comercio y servicios siguen siendo considerablemente inferiores a los del resto de países de la UE», señalan.
